Pocos lugares hay en Aragón tan curiosos como el Monasterio de San Juan de la Peña. Este antiguo cenobio no llama excesivamente la atención por su fachada exterior, pero dejará a todos sus visitantes con la boca abierta por su ubicación al abrigo de una enorme roca. Y las sorpresas no cesa en el interior, ya que es donde esta obra da evidencia de que es toda una joya del románico en España.
Quién fundó el Monasterio de San Juan de la Peña
El Monasterio Nuevo de San Juan de la Peña se encuentra en el municipio de Jaca, en Huesca. Tiene su origen en el siglo X, cuando fue construido en su excepcional ubicación y totalmente mimetizado con el entorno. "Los datos históricos nos conducen a la fundación de un pequeño centro monástico dedicado a San Juan Bautista del que sobreviven algunos elementos", señalan desde la propia web del monasterio.
Durante el primer tercio del siglo XI, fue refundado bajo el nombre de San Juan de la Peña por parte de Sancho el Mayor de Navarra. Así, el edificio se fue ampliando con nuevas construcciones, sobre todo cuando se convirtió en "el panteón de reyes y monasterio predilecto de la incipiente monarquía aragonesa, que lo dotó con numerosos bienes", tal y como explican.
Un panteón de reyes y nobles
En el año 1071, este cenobio fue el encargado de introducir por primera vez en la Península Ibérica el rito litúrgico romano, seguido en toda la Iglesia de Occidente y en detrimento de antiguo rito hispano-visigótico. En el interior del Monasterio de San Juan de la Peña podremos encontrar varios tesoros artísticos y arquitectónicos.
Para empezar, destaca la iglesia prerrománica, además de las pinturas de San Cosme y San Damián, que datan del siglo XII. También nos sorprenderá el llamado Panteón de Nobles, la iglesia superior de 1094, la capilla gótica de San Victorián y el precioso claustro románico. Después de la época medieval, en el siglo XVIII, se construyó el Panteón Real en estilo neoclásico.
Así, alberga los restos de varios monarcas navarros que reinaron en Aragón, así como de los primeros condes aragoneses y de los tres primeros reyes de la dinastía ramirense, Ramiro I, Sancho Ramírez, Pedro I, junto con sus esposas.
La construcción del Monasterio Nuevo
Tras un largo periodo de decadencia que inicio en el siglo XII, el edificio se fue deteriorando cada vez más hasta que en el año 1675 se decidió construir el Monasterio Nuevo. Esta otra construcción se levantó en una zona cercana, concretamente una pradera conocida como Llano de San Indalecio. Las obras se alargaron hasta los primeros años del siglo XIX y el resultado fue "uno de los ejemplos más perfectos y evolucionados de la arquitectura monástica en la Edad Moderna", detallan. Sobresale la bonita fachada de su iglesia con su detallada decoración floral.
Al igual que el monasterio viejo, el nuevo también fue abandonado y empezó a deteriorarse hasta quedar prácticamente en ruinas. Sin embargo, el Gobierno de Aragón llevó a cabo una trabajo de restauración que devolvió a la vida el cenobio. A día de hoy, acoge el Centro de Interpretación del Monasterio de San Juan de la Peña.
Visitar el monasterio: precios y horarios
La tarifa normal tiene un precio de 12 €, mientras que la reducida es de 7,5 € (personas mayores de 65, niños de 6 a 14 años, Carnet Peregrinos, Carnet Joven, discapacitados (grado +50 %), familia numerosa y grupos de más de 20 personas. Los menores de 6 años entran gratis.
En cuanto a los horarios, son los siguientes:
- Del 1 de septiembre al 31 de octubre: Monasterio Viejo: de 10 a 14 h y de 15:30 a 19 h. Monasterio Nuevo: de 10 a 19 h.
- Del 1 de noviembre al 15 de marzo: Sábados de 10 a 17 h. De lunes a viernes y domingos de 10 a 14 h. Cerrado el 25 de diciembre y el 1 de enero.
- Del 16 de marzo al 31 de mayo: Monasterio Viejo: de 10 a 14 h y de 15:30 a 19 h. Monasterio Nuevo: de 10 a 19 h.
- Del 1 de junio al 31 de agosto: Monasterio Viejo: de 10 a 14 h y de 15 a 20 h. Monasterio Nuevo: de 10 a 20 h.
Cómo subir al Monasterio de San Juan de la Peña
El trayecto en coche entre la ciudad de Huesca y el Monasterio de San Juan de la Peña es de aproximadamente 1 hora y 10 minutos por la A-23. El acceso de hace a través de la carretera N-240 (Jaca/Pamplona), tomando el desvío a la localidad de Santa Cruz de la Serós.
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