Un día después de que Raquel y Ginés se convirtieran en la mejor pareja de Fama, Sergi, el robot de la escuela, el maquinote (como diría Rafa Méndez), se convertía con los votos del público en el mejor bailarín del popular reality de danza.

El ganador tuvo que vérselas en los momentos finales con Yure, la otra gran favorita de los espectadores. La tensión era máxima. Unos deseaban que Yure recibiese una recompensa a su innegable afán de superación y su gran disposición para el trabajo. Por otro lado, muchos pensaban que era injusto que la canaria obtuviese un premio tal vez más merecido por bailarinas más completas y versátiles como Eli, Eva, Raquel o Ariadna e Iraida, que ni siquiera llegaron a competir en la final.

Yure tenía además el apoyo del siempre fiel pueblo canario. Sin embargo, el apoyo del público a Sergi fue total. Se notaba en las galas -cuando él aparecía, la plaza se venía abajo-, y se notó en los porcentajes: el joven concursante ganó con aproximadamente un 30% de los votos, más de un 10% por encima del segundo puesto, según los últimos porcentajes oficiales mostrados por Paula Vázquez.

Yurena, la canariona eternamente nominada y retada, la concursante que más obstáculos ha superado para llegar hasta la final, se quedó pues con la nada despreciable medalla de plata. Muy cerquita del podio quedaron Raquel, Ginés y Eva (pareja de baile de Sergi). El ranking lo completaban Eli, Erik y Miguel (pareja de baile de Yure).

Todos ellos compartieron ayer escenario, en la Cubierta de Leganés, con el resto de compañeros que han pasado por el programa. Además, se produjo un emotivo encuentro con la primera generación de bailarines del concurso, un preludio del nuevo Fama que comenzará el lunes.