Telecinco emitió la final de La última tentación este miércoles 3 de noviembre. En ella, todas las parejas se reencontraron y tomaron una importante decisión: la de volver de República Dominicana continuando sus relaciones o en solitario.

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Una de ellas, la formada por Jesús Sánchez y Marina García, se enfrentó al programa con la finalidad de que esta última consiguiera recuperar la confianza de Jesús para comenzar una nueva fase en su relación, que se rompió en La isla de las tentaciones 3, cuando la sevillana le fue desleal con Isaac Torres.

Sin embargo, todo eso pareció haber quedado atrás en el su hoguera final en La última tentación. Desde que se vieron, ambos se mostraron tranquilos y felices. Tanto es así, que Marina rompió a llorar nada más encontrarse con Jesús, su actual pareja: "Es que estoy muy sensible", explicó.

La pareja se mostró muy arrepentida por haberse dañado en el pasado y ninguno de ellos dudó a la hora de decir que estaban delante del amor de su vida. La presentadora, Sandra Barneda, no pudo evitar emocionarse ante la escena, como ha ocurrido en otras ocasiones. 

Ya en El debate de las tentaciones desveló que la de Marina y Jesús era la hoguera que más ganas tenía de ver en la televisión. "Le quiero. Ha cambiado físicamente, personalmente... es otro. Y por eso tengo otra vez esta ilusión", declaró la sevillana.

El emotivo discurso de Jesús

Por su parte, Sánchez dejó claro que, pese a haber conocido a otras chicas, se había dado cuenta de que a sus ojos solo existía Marina; y comentó que le daba igual lo que dijeran los demás sobre su decisión, pues tenía derecho a ser feliz.

"Marina es la persona que quiero y me da igual lo que diga la gente. Todo el mundo tiene derecho a ser feliz con quien quiera y si soy feliz a su lado, ¿por qué no voy a estar con ella? Quiero que seas la persona con la que me levante todos los días. Quiero besarte todos los días", concluyó Jesús antes de fundirse en un abrazo con su novia.