La candidata del PSOE a la Alcaldía de Santander, Eugenia Gómez de Diego, ha elogiado este miércoles la labor que realiza la Cocina Económica de las Hijas de la Caridad, que es "más importante que nunca" en estos momentos, ya que "hay más personas que lo están pasando mal en nuestra ciudad".

Gómez de Diego ha realizado estas declaraciones tras visitar las instalaciones del centro, en compañía de su directora, María Dolores Jiménez, y comprobar la gran labor que realizan atendiendo a "gente que busca solidaridad en situaciones personales muy complicadas".

La candidata del PSOE ha reivindicado la solidaridad como "un valor fundamental en estos tiempos", y ha querido "reconocer" el trabajo de "tantas y tantas personas que trabajan o son voluntarios en las diferentes organizaciones sociales que desarrollan su tarea en Santander, y que dedican su tiempo a hacer la vida un poco más sencilla a los demás".

Gómez de Diego ha recordado que "la principal aportación" de la Cocina de Económica es la del Gobierno de Cantabria, que en su "apuesta" por las políticas sociales, destina al centro 147.000 euros este año 2011, lo que supone haber superado el millón de euros desde que los socialistas están en el Gobierno regional al frente del área social.

La secretaria general de los socialistas santanderinos también ha puesto en valor iniciativas como la Ley cántabra de Derechos y Servicios Sociales, así como la Ley de Atención a la Dependencia, "ambas impulsadas por los socialistas y que otorgan derechos a los ciudadanos y el reconocimiento a una vida digna donde antes no había nada".

Cocina económica

La Cocina Económica ofrece comida a personas sin recursos, así como alojamiento y una atención inmediata a quienes carecen de un hogar.

Para ello cuenta, además de con la Comunidad de Hijas de la Caridad, con tres cocineras, cuatro limpiadoras, una recepcionista, una trabajadora social, una monitora de talleres, una economista y 50 voluntarios.

El objetivo de la institución, que trabaja en Santander desde 1908, es mejorar la calidad de vida del excluido social mayor de 18 años, y en la medida de lo posible recuperarlo y promocionarlo, para que encuentre recursos que posibiliten su reinserción socio-laboral.

Unas 120 personas comen diariamente en el centro, donde además disponen de servicio de duchas, lavandería, almacenes de ropa y talleres ocupacionales, en los que además de realizar diversas piezas de artesanía, trabajan la autoestima y fomentan sus capacidades para la búsqueda de empleo.