El albergue de la localidad zaragozana de Nonaspe ya está terminado y podría abrir sus puertas para Semana Santa. Tras concluir las obras de construcción tan sólo quedan los últimos detalles, como motar la instalación eléctrica o colocar el mobiliario.

El albergue cuenta con 36 plazas, que conforman la única posibilidad para hospedarse en el municipio. Estas instalaciones han requerido una inversión de 220.775 euros, que se han financiado a través del Plan de Dinamización del Producto Turístico de la Comarca Bajo Aragón-Caspe/Baix Aragó-Casp.

El centro ocupa un terreno de 220 metros cuadrados al oeste del núcleo urbano de Nonaspe y tiene su entrada por la avenida de Cataluña. El edificio se divide en cuatro habitaciones individuales y colectivas con baño, una sala-comedor y una sala de estar multiusos.

"Nonaspe era el único municipio que carecía de plazas de hospedaje. Con el Plan de Dinamización queremos equilibrar los recursos existentes en la Comarca para que todos los lugares puedan recibir visitantes que pernocten y generen riqueza", ha explicado el presidente del Bajo Aragón-Caspe/Baix Aragó-Casp, Javier Sagarra durante su visita a las instalaciones.

Este nuevo albergue permitirá activar el turismo rural en el municipio. "Creo que potenciará el turismo rural y de naturaleza. En Nonaspe, además del patrimonio cultural que tenemos (como el castillo o la ermita de la Virgen de Dos Aguas), también contamos con una gran riqueza natural", ha estimado el alcalde del municipio, Joaquín Llop.

Como valor añadido, los huéspedes podrán disfrutar de las instalaciones deportivas que se encuentran alrededor del albergue. En el futuro, este entorno se acondicionará, limpiándolo y colocando bancos y vegetación.