La viceportavoz del Grupo Parlamentario Popular, María Luisa Soriano, ha asegurado que no comparte la lectura "sesgada y torticera" del PSOE a la enmienda a la totalidad que los 'populares' han presentado a la Ley del Agua. Además, ha señalado que los socialistas, con estas manifestaciones, buscan el "enfrentamiento" con los ciudadanos.

A preguntas de los medios durante una rueda de prensa, Soriano ha apuntado que el Gobierno regional y el PSOE tienen que resolver, "de una vez por todas", el problema del agua en Castilla-La Mancha, insistiendo en que no tienen que buscar la confrontación de los ciudadanos por un tema "tan esencial".

Del mismo modo, ha manifestado que los comentarios que ha hecho el PSOE sobre la enmienda del PP al tacharla de "recorte hecho con tijera murciana y valenciana, y con una importante dosis de chapuza" no tienen "ninguna significación" y ningún "fundamento".

Es por ello por lo que ha afirmado que el texto que han presentado los 'populares' a la Ley del Agua de Castilla-La Mancha es una "alternativa mucho más ambiciosa" para la región, que atiende las necesidad actuales y futuras de la Comunidad Autónoma, con una amplitud de miras "mucho mayores" que el documento presentado por el PSOE. CONSENSO

Preguntada por si el consenso entre PSOE y PP es difícil, Soriano ha señalado que las "posturas no son tan diferentes", y que lo que se tiene que hacer es defender el agua para la región. Así, ha añadido que los 'populares' "siempre" han abogado por la defensa del agua que necesitan los ciudadanos, y que "no merecemos que haya ciudadanos que tengan que recibir el agua en cisternas".

"Lo que los ciudadanos quieren y necesitan es agua, y lo que su Gobierno socialista ha sido incapaz de aportarles en estos 30 años ha sido agua tanto en calidad como en cantidad suficiente como la ciudadanía se merece", ha argumentado.

Soriano también ha sido preguntada por la sentencia de Tribunal Constitucional (TC) en la que ha declarado inconstitucional y nulo de pleno derecho el artículo 51 del Estatuto de Autonomía de Andalucía, que reconoce a la comunidad competencias exclusivas sobre las aguas de la cuenca del Guadalquivir que discurren por la comunidad.

En este sentido, ha señalado que esta circunstancia se ha dado porque Extremadura ha presentado alegaciones a este Estatuto al afectaba a su territorio, y ha recordado que también afecta al territorio de Castilla-La Mancha y que "aquí, nuestro Gobierno, no ha salido en ningún momento a defender el agua". VINO

De otro lado, en su intervención ante los medios, Soriano se ha referido al "silencio cómplice" del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, después de que el senador socialista Juan Bautista Cardona, haya dicho en la Cámara Alta que "el vino es una droga".

Según la parlamentaria 'popular', este silencio del presidente castellano-manchego demuestra su "cobardía" al "no da la cara a la hora de defender a Castilla-La Mancha y, mucho menos a sus agricultores y ganaderos".

Soriano ha destacado que "se trata de un nuevo varapalo y ataque al producto estrella de nuestra tierra, un alimento que forma parte de nuestra cultura e identidad, y un producto que consumido con moderación tiene efectos beneficiosos para la salud, del que viven más de 70.000 familias de Castilla-La Mancha".

Para la dirigente 'popular', Barreda también ha "engañado" a los agricultores con planes de reestructuración del viñedo que carecen de fondos, "por lo que les dejará en la estacada sin ningún tipo de escrúpulos". Además, se ha referido a "otras traiciones al campo castellano-manchego, como su promesa estrella de las ayudas al secano o la regularización de pozos en el Alto Guadiana".