Uno de los tres acusados de estafar a agricultores en Tomelloso (Ciudad Real) muestra su voluntad de pagar

Uno de los tres acusados de estafar unos 84.000 euros a más de 20 agricultores de Tomelloso y a la cooperativa de Argamasilla de Alba, en Ciudad Real, ha reconocido que debe ese dinero y ha mostrado su voluntad de pagar si fuera posible.
Audiencia provincial de Ciudad Real
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Uno de los tres acusados de estafar unos 84.000 euros a más de 20 agricultores de Tomelloso y a la cooperativa de Argamasilla de Alba, en Ciudad Real, ha reconocido que debe ese dinero y ha mostrado su voluntad de pagar si fuera posible.

La Sección Primera de la Audiencia de Ciudad Real ha comenzado este martes a enjuiciar este caso, en el que el fiscal pide cinco años de prisión para cada no de los tres hombres procesados por un delito de estafa continuada, además de tener que indemnizar a las agricultores afectados.

Los perjudicados vendieron en agosto y septiembre de 1998 cantidades de melones, pimientos y otros productos agrícolas a la compañía Margo Export, con la que ya habían tratado en ocasiones anteriores.

No obstante, en esta ocasión, los acusados no hicieron caso a sus obligaciones y no respondieron a las reclamaciones por los productos vendidos, que tenían un coste total de unos 84.000 euros.

En la primera sesión de la vista oral, este martes, J.J.M.S., uno de los acusados, provenientes de la provincia de Almería, como el resto, ha reconocido que formó la compañía Margo Export con otro de los acusados, J.M.M.V., un empleado de empresas familiares dedicadas también a la venta al por mayor de productos agrícolas.

No obstante, el acusado ha señalado durante la vista que esta empresa nunca estuvo activa y que no se hicieron negocios con la misma.

Por otro lado, J.M.M.V. ha indicado que él lo único que hizo fue firmar la constitución de la empresa y la venta al tercer acusado, A.F.T.

Este último ha declarado que compró Margo Export porque ya estaba constituida y ello le facilitaba poder empezar a actuar en el negocio de la venta de fruta y otros productos hortícolas.

En todo caso, ha explicado que la deuda con los agricultores ciudadrealeños, a los que pagaba a través de intermediarios que hacían el transporte de los productos, a veces en metálico, otras con pagarés, se debió a las circunstancias del negocio, dado que él empezó a no recibir el pago tras la venta de la fruta, que se hacía por el mismo método.

El juicio continuará este miércoles, con la decoración de los agricultores afectados.

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