El PP condiciona su apoyo al decreto de para el reforzamiento del capital de las entidades financieras a que el Gobierno le garantice que aceptará que aquellas que necesiten captar capital, especialmente las cajas de ahorro, puedan hacerlo a través de un amplio abanico de opciones que no pasen necesariamente por la emisión de acciones, procedimiento que implicaría la 'nacionalización' de las entidades con la entrada del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).

Para los 'populares', la redacción del decreto ley que el Congreso convalidará el martes es lo bastante "amplia" como para permitir que su aplicación no exija a las entidades que únicamente emitan acciones, sino que se pueda optar por otras herramientas, que irían desde la constitución de esquemas de protección financiera a que el FROB pueda seguir adquiriendo participaciones preferentes o cuotas participativas, como hacía antes de la última reforma.

Esto podría hacerse sin necesidad de cambiar la norma ni ulteriores desarrollos reglamentarios, según el PP, que afirma que bastaría con que la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, le confirme que aceptará estas opciones para la recapitalización de las entidades que lo necesiten.

El PP dice hacerse eco de las inquietudes del sector y teme que una masiva emisión de acciones por parte de las cajas para captar financiación fracasaría en los mercados financieros, lo que redundaría muy negativamente en la solvencia de las entidades y obligaría al FROB a una actuación "masiva".

El pp negocia con el gobierno

En la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, la portavoz del Grupo Popular, Soraya Sáenz de Santamaría, ha recordado que su partido está en conversaciones sobre esta cuestión con el Ejecutivo y se ha quejado de que éste aún no ha concretado cómo se va a aplicar el decreto ni ha aclarado otras "dudas" planteadas por los 'populares'.

En todo caso, la dirigente del PP ha puesto de manifiesto que la prioridad para su partido es que se pueda recuperar el acceso al crédito. Y es que, según ha denunciado, en España ha habido seis reformas del sistema financiero "y cada vez es más difícil obtener un crédito".