Cantabria mantuvo en enero la línea descendente de la siniestralidad laboral con la que cerró el año 2010. En total, en el primer mes del año se registraron en la región 394 accidentes laborales con baja, lo que supone un descenso del 15 por ciento con respecto al mismo mes de 2010.

Según datos del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo, recogidos por Europa Press, en enero no hubo accidentes mortales y sólo se registraron tres de carácter grave, los mismos que en enero del pasado año. Por su parte, los accidentes leves disminuyeron de los 466 del primer mes de 2010 a los 394 de este enero.

Por sectores, los servicios concentran el 51 por ciento de la siniestralidad laboral en Cantabria, con 201 accidentes en el mes de enero. A continuación se sitúa la industria, con 111 (el 28%), y después la construcción, con 62 accidentes (el 16%).

En último lugar se encuentra el sector agropecuario y pesquero, que representa el 5 por ciento de los siniestros laborales (20 en el primer mes del año).

Ese reparto de los accidentes laborales por sectores se repite en el caso de los siniestros leves, donde los servicios vuelve a concentrar el mayor número de partes, pero cambia en el caso de los accidentes graves. Así, de los tres siniestros graves ocurridos en enero, dos fueron en la construcción y uno en la industria.

Comparado con enero de 2010, todos los sectores han reducido su siniestralidad, menos el agrario. El mayor descenso se observa en la construcción, con una disminución del 22 por ciento. En los servicios, por su parte, el descenso fue del 16 por ciento, lo mismo que en la industria.

En cambio, en el sector agropecuario y pesquero aumentó un 43%, al pasar de los 14 accidentes registrados en enero de 2010 a 20 siniestros un año más tarde.