El Ayuntamiento de Santander lanza la campaña 'Cada cosa tiene su lugar', mediante la cual se instalarán 30 ceniceros en los accesos a instalaciones municipales y se repartirán 5.000 ceniceros portátiles, con el objetivo de eliminar las colillas del suelo.

Además, habrá acciones de información y sensibilización a través de cartelería, tanto en las traseras de los autobuses del Servicio Municipal de Transportes, como en algunas aceras, recordando que " ese no es el lugar para tirar residuos".

La imagen de los carteles de la campaña 'Cada cosa tiene su lugar' es una colilla bajo el título "No me dejes tirada".

Además de la cartelería, el Ayuntamiento pondrá en marcha otras acciones directas encaminadas a disminuir el número de colillas y residuos que se tiran al suelo.

En este sentido, a partir de hoy comenzarán a instalarse 30 ceniceros a pie de calle en distintos puntos de la ciudad, como centros cívicos, mercados, oficinas y dependencias de turismo o instalaciones deportivas entre otras.

Las nuevas papeleras metálicas que se han instalado últimamente en la ciudad, ya disponen de cenicero incorporado para que los fumadores puedan apagar cómodamente el cigarro y después depositarlo en el interior de la misma.

Además y como complemento, el Ayuntamiento instalará ceniceros en todas aquellas papeleras metálicas que aún no lo tengan.

"Con estas medidas queremos acabar con esa imagen que ofrecen las colillas y los pequeños residuos tirados en la calle que, a pesar del buen trabajo de los servicios de limpieza, aparecen por la ciudad dando una imagen negativa de nuestro entorno", explica la concejala de Medio Ambiente, Carmen Ruiz.

Con el mismo objetivo, el Ayuntamiento de Santander repartirá desde hoy por la calle 5.000 ceniceros de bolsillo con más de un uso, como soporte a esta iniciativa que pretende implicar a todos los vecinos en la mejora constante de la imagen de la ciudad.

Con el uso de estos ceniceros de bolsillo, realizados con material ignífugo y reutilizables, se evitará que las colillas aparezcan tiradas en las calles.

"Se apaga el cigarrillo, se guarda en el cenicero y se vacía en la primera papelera que encuentren a su paso. Es un gesto muy sencillo, pero muy valioso para la imagen de la ciudad", explicó Ru.

Según la concejala de Medio Ambiente "con estas medidas apelamos a la responsabilidad que siempre han demostrado los vecinos de Santander en el respeto a su entorno. Podemos presumir de ser una de las ciudades más limpias de España y queremos seguir siéndolo, algo que conseguiremos entre todos", afirmó.