El juez exime al Ayuntamiento de responsabilidad por el sacrificio de un ternero que se escapó del ferial

El TSJC anula una multa de 6.000 euros impuesta por la CHC al Consistorio por captar más agua del Besaya de la autorizada
Pedro Aguirre
Pedro Aguirre
EP
Pedro Aguirre

El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número Dos de Santander ha eximido al Ayuntamiento de Torrelavega de responsabilidades patrimoniales en el sacrificio de un ternero que se escapó del Mercado Nacional de Ganados durante una de las ferias semanales.

El resultado de este contencioso, que había interpuesto el tratante propietario del animal, "es importante, al margen de la anécdota, porque delimita las responsabilidades municipales en este tipo de casos", explicó hoy el portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Torrelavega, Pedro Aguirre.

Los hechos ocurrieron cuando, en el transcurso de una de las ferias de ganado semanales que se celebran, un ternero destinado al consumo de carne se escapó del control de su dueño. Para evitar males mayores, los responsables del Ferial decidieron inmovilizarlo con una sustancia y, posteriormente, sacrificarlo al no poderse ya destinar al consumo humano; la actuación, denunciada por el propietario del animal, que exigía una indemnización, ha sido avalada por el Juzgado.

Multa de la chc anulada

Este es uno de los asuntos tratados en la Junta de Gobierno Local celebrada el pasado lunes, de la que informó hoy el concejal y en la que también se dio cuenta de la anulación de una multa impuesta al Ayuntamiento por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico por captar agua del río Besaya por encima de la cantidad autorizada.

Según explicó Aguirre, el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) ha revocado la multa de 6.010 euros de importe que impuso la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) al Ayuntamiento por este motivo, al entender la Sala que no hay pruebas suficientes de que el Consistorio tomara más agua del que tenía autorizado.

La Confederación había impuesto esa multa al Ayuntamiento porque, según un informe técnico, este Consistorio había tomado más caudal del que tenía permitido en el cauce del río Besaya, en concreto en un punto del municipio de Arenas de Iguña. Los técnicos que visitaron el lugar cuantificaron el exceso de toma de agua en unos 200 litros por segundo y, según explicaron, ese caudal se vertió al arroyo Muriago mediante una tubería de rebose situada a la entrada de la planta potabilizadora de Los Corrales. Los técnicos sostenían en su informe que el Ayuntamiento había repetido esa conducta de forma habitual durante la época de estiaje.

El Consistorio torrelaveguense alegó, entre otras cuestiones, que los hechos que se le achacaban no se correspondían con el tipo sancionador que se le aplicó y que no había pruebas, porque, a su juicio, el acta de la guardería fluvial era insuficiente para acreditar las acusaciones. La Sala ha dado la razón al Ayuntamiento y cree que las irregularidades que se le imputaban no se corresponden con el tipo que se aplicó, ya que se contaba con autorización para captar el agua. "Por ello, la multa que ya había sido cobrada será devuelta a las arcas municipales", destacó el edil socialista. 25.000

Euros en alumbrado

El tercer asunto destacado, al margen de las habituales concesiones de licencias de obra, fue la aprobación del informe del Servicio Técnico Industrial del Ayuntamiento que recomienda la reforma y renovación del alumbrado público existente en el entorno de la avenida de Fernando Arce, la Granja Poch y el acceso a la Fundación Asilo.

Un alumbrado "antiguo que gasta mucho y genera gran contaminación lumínica", reconoció Aguirre, que será sustituido por otro de eficiencia energética. La actuación se estima supondrá una inversión de 25.000 euros.

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