El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Lluís Recoder, se ha comprometido con el alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, a aprobar el Plan de Ordenación Urbanística Municipal (Poum) en un máximo de tres meses, según ha informado el consistorio.

En la reunión que conseller y alcalde han mantenido este martes, también se han abordado temas como la continuidad de nuevas convocatorias de la Ley de Barrios, a las que Ballesteros quiere presentar un proyecto para incluir las zonas de Sant Salvador y Sant Ramon.

Recoder se ha comprometido a continuar con la Área Residencial Estratégica (ARE) del Pou Boronat —donde se tiene que construir la villa de los Juegos del Mediterráneo—, proyecto que el conseller ha considerado "básico y prioritario".

Ballesteros también ha aprovechado la ocasión para reclamar que no se paren los proyectos de la Fachada Marítima, el tranvía, la estación de tren y el desarrollo de la red de Rodalies, lo que el alcalde ha considerado vital para poblaciones como Valls, Montblanc, Falset, El Vendrell y Reus.

El líder municipal se ha mostrado contundente sobre que el recorte presupuestario de la Generalitat pueda afectar a inversiones sanitarias como el edificio de consultas externas del Hospital Joan XXIII o el Centro de Alta Resolución de Campclar: "Me parece impresentable y estaré radicalmente en contra de quien pueda parar las inversiones prioritarias para la ciudad de Tarragona".

En este sentido, ha argumentado que el Centro de Atención Primaria de la Granja está colapsado, por lo que no tolerará que "inversiones previstas se queden en el cajón".