En el vídeo, retransmitido ayer por varias cadenas estadounidenses, funcionarios de los servicios de emergencia advertían al presidente un día antes del embate del Katrina (el 29 de agosto) de que podría destruir las barreras de contención que protegen Nueva Orleans de inundaciones e, incluso, podría destruir –como después ocurrió– el techo del Superdome, estadio donde gran parte de la población se refugió.

«Estamos listos», aseguró Bush, ante un fenómeno natural que más tarde mataría a más de 1.300 personas.

El alcalde de la ciudad, Ray Nagin, se mostró conmocionado ante la noticia, porque, en cambio, «la respuesta fue muy lenta».

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Durante el 11-S: Bush no supo reaccionar cuando fue informado de los ataques a las Torres Gemelas durante una visita a una guardería de Florida. Continuó leyendo cuentos, a pesar de la emergencia.

Sin escape: Tratando de evitar a la prensa durante una conferencia en Pekín (China) en noviembre, intentó marcharse por una puerta que, para su sorpresa, estaba cerrada.