El Ayuntamiento de Valladolid ultima ya la redacción de la nueva ordenanza de ocupación del espacio público por terrazas de establecimientos de hostelería, que cambiará el modo de tarificación para que el pago se realice en función de los metros cuadrados de suelo ocupados y que introducirá la obligación de que los bares y restaurantes se responsabilicen de la limpieza de la calle.

En declaraciones recogidas por Europa Press tras una rueda de prensa celebrada en el Centro Cívico Juan de Austria, el regidor vallisoletano ha apuntado que a partir de este año los hosteleros pagarán en función del suelo público ocupado en lugar de por el número de mesas y sillas instaladas, como ocurría hasta ahora.

La nueva ordenanza, como ha aseverado León de la Riva está "a punto de caramelo" y ha recalcado que no supondrá un "incremento preocupante" del coste de las terrazas. En el texto aún vigente sólo se preveía la instalación de mesas convencionales con cuatro sillas, y con la modificación podrán colocar veladores, estufas y otros elementos que consideren necesarios, como mamparas para delimitar el espacio en terrazas que estén pegadas a las paredes.

Asimismo, la ordenanza incorporará la necesidad de que las mesas tengan ceniceros, ya que se espera que con el buen tiempo los fumadores prefieran instalarse más en las terrazas a causa de la prohibición de fumar en el interior de los locales. León de la Riva ha advertido de que los hosteleros también tendrán que limpiar la calle sobre todo en lo referente a colillas.

En este sentido, el primer edil ha mostrado más preocupación por el ruido que causen los grupos de gente que fumen en el exterior de los establecimientos. "Los españoles somos de hablar a voces y de momento, en invierno, no hay problema porque la gente duerme con las ventanas cerradas. Veremos qué ocurre cuando las ventanas se abran más a menudo", ha apuntado.

Asimismo, ha mostrado su "respeto" por la decisión que tomaron los hosteleros de cerrar sus puertas en señal de protesta el próximo lunes y ha considerado que el Gobierno debería haber buscado "una solución" con los hosteleros para que "en determinados espacios fuera compatible tomarse un café y fumarse un cigarrillo".

Ha recordado también que no comprende que hace "un par de años" —en 2006— "se obligara a los hosteleros a realizar inversiones importantes para adaptar sus locales" a una primera modificación de la Ley que "de buenas a primeras ahora no vale para nada".

Por su parte, el subdelegado del Gobierno, Cecilio Vadillo ha explicado que su competencia respecto a la movilización de los hosteleros vallisoletanos se reduce a adoptar las medidas de seguridad para que no se produzcan "problemas de seguridad ciudadana ni de orden público". No obstante, ha mostrado su seguridad de que las reivindicaciones serán defendidas "sin problemas".

No obstante, ha añadido que los sindicatos sí que han mostrado a la Subdelegación su "preocupación" por los posibles perjuicios del cierre patronal en los trabajadores y ha incidido en que esta materia corresponde a la Comunidad Autónoma. Además, ha añadido que en la sede de la representación gubernativa no se tiene notificación de los locales que vayan a cerrar el lunes.