Un estudio para 'La miel es más dulce que la sangre' bate el récord de venta de Dalí

  • Alcanzó los 4.794.215 euros en una subasta en Christie's.
  • El cuadro homónimo está desaparecido pero se conserva el lienzo preparatorio.
  • Supuestamente inspira su relación con Federico García Lorca.
El pintor español Salvador Dalí.
El pintor español Salvador Dalí.
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El pintor español Salvador Dalí.

Un estudio para La miel es más dulce que la sangre, una de las creaciones de Salvador Dalí de gran valor histórico, ha batido un récord de venta para el artista al ser subastada en Christie's de Londres por 4.794.215 euros.

El cuadro homónimo, de 1927, supuestamente inspirado en la relación del creador español con su compatriota el poeta Federico García Lorca, está desaparecido, pero se conserva el lienzo preparatorio, cuyo precio se había estimado en 3,4 millones de euros (unos 4,6 millones de dólares).

Durante la puja, esta obra de enorme belleza y gran valor histórico superó un récord mundial para Dalí, según indicó un portavoz de Christie's.

Se trata de una de las primeras obras surrealistas de Dalí y refleja la influencia de otras destacadas figuras de ese movimiento, entre ellas Yves Tanguy, además de incluir imágenes, como el cadáver de un burro rodeado de moscas, que resultan familiares por otras creaciones, como la película El perro andaluz, en el que el pintor colaboró con el cineasta Luis Buñuel.

Una frase que le obsesionaba

La frase del título parece haber obsesionado al genio español toda su vida y aparece citada en su autobiografía La Vida Secreta de Salvador Dalí, donde califica el placer solitario de la masturbación como "más dulce que la miel" mientras que para su amigo Lorca las relaciones sexuales eran como "una selva de sangre".

El temor al sexo ya la mujer son constantes en el arte daliniano de esos años, que culminan en los cuadros titulados El gran Masturbador y El Juego Lúgubre.

En la pieza vendida por Christie's, esos motivos fetichistas surgen sobre una playa que corta en diagonal el cuadro y en la que aparecen, además del burro muerto y agujas clavadas en la arena, un cadáver decapitado de mujer y una cabeza con los ojos cerrados que podría ser la de García Lorca.

Se quedó, en cambio, sin comprador, pese al gran interés suscitado, otra de las obras de Dalí, de mayor tamaño Las llamas, llaman, pintada en 1942 en Estados Unidos, a donde el artista se había trasladado con su esposa, Gala, huyendo de la guerra en Europa. Esa obra había partido con un precio estimado de 4,5 millones de euros.

Dalí había sido objeto poco antes de una exposición en el Museo de Arte Moderno neoyorquino junto a su compatriota Joan Miró, exposición que viajaría a varias ciudades del país y que aumentaría su fama hasta el punto de ser solicitado para trabajar en los decorados de producciones de ballet y con cineastas como Alfred Hitchcock y el dibujante Walt Disney.

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