Cantabria registró el pasado año 5.800 accidentes laborales, lo que supone un descenso del 15 por ciento con respecto a 2009. Ese ajuste se observó en todos los sectores, y también en todos los tipos de accidentes, sobre todo en los graves, y en menor medida en los mortales.

Según datos del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo recogidos por Europa Press, en total, en 2010 se produjeron en la región 5.826 accidentes laborales con baja, frente a los 6.869 de un año antes.

En cifras absolutas, la mayor reducción corresponde a los accidentes leves, al registrarse 1.028 menos que en 2009, pero en términos relativos el descenso más destacado es el de los accidentes graves, que bajaron un 16 por ciento.

En concreto, el pasado 2010 se contabilizaron 75 accidentes graves, frente a los 89 de un año antes. Por su parte, los accidentes leves se redujeron un 15%, pasando de 6.767 en 2009, a 5.739 el pasado año.

En el caso de los accidentes mortales, el descenso de la siniestralidad ha sido del 8 por ciento, ya que el pasado ejercicio fallecieron doce trabajadores, uno menos que en 2009.

Por sectores, los servicios concentran algo más del 48 por ciento de la siniestralidad laboral en Cantabria, con 2.809 accidentes en 2010. A continuación se sitúa la industria, con 1.672, y después la construcción, con 1.089 accidentes.

En último lugar se encuentra el sector agropecuario y pesquero, que representa el 4,3 por ciento de los siniestros laborales (256 el pasado ejercicio).

Por lo que respecta a los accidentes mortales, cuatro de los fallecidos trabajaban en la industria (todos ellos en la industria manufacturera), tres en la construcción, otro en el sector agropecuario, y cuatro en los servicios (tres en transporte y almacenamiento y uno en hostelería).

Comparado con 2009, todos los sectores han reducido su siniestralidad, en especial la construcción, con una disminución del 26 por ciento. En los servicios, por su parte, el descenso ha sido del 14 por ciento, mientras en el sector agropecuario y pesquero ha bajado un 17%, y en la industria un 8 por ciento.