Las carreteras cántabras registraron el año pasado un total de 18 accidentes de tráfico mortales en los que fallecieron 19 personas, lo que convierte a la comunidad autónoma en la segunda de toda España con menor siniestralidad.

Estas cifras son las mismas que en 2008 y las más bajas desde que se dispone de estadísticas. Y suponen 5 muertos menos que en el año 2009, lo que representa un descenso del 17%, que es de un 51% si se compara con 2003. La media de fallecidos al mes en accidentes de tráfico fue en 2010 de 1,5 personas, con un parque de automóviles que se sitúa en 400.000 vehículos.

Estos datos fueron difundidos este martes por el delegado de Gobierno en Cantabria, Agustín Ibáñez, quien ha incidido en que los datos demuestran que se está "por el buen camino", pero ha precisado que hay que "seguir trabajando" para reducir la siniestralidad y "sacar de las carreteras" a los conductores que "no acatan las normas".

Los fallos humanos (distracciones o velocidades inadecuadas) siguen siendo la principal causa de la mayoría de los accidentes mortales que además, afectaron en su mayoría a motociclistas y ciclistas.

En concreto, en 2010 fallecieron siete motoristas y tres ciclistas,

por lo que Ibáñez ha llamado a la "precaución" a los conductores de estos vehículos y también a los del resto, para que tengan en cuenta que estos sufren "daños mayores" cuando sufren un accidente.

Estas cifras se refieren a los fallecimientos ocurridos en vías interurbanas dentro de las 24 horas siguientes al accidente, y fueron presentadas por Ibáñez junto al jefe provincial de Tráfico de Cantabria, Serafín Sánchez, y el comandante del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, Lorenzo Bárez.

Además de ser la segunda comunidad con menos siniestralidad, sólo por detrás de La Rioja, Cantabria, como territorio uniprovincial, se encuentra entre las 10 provincias españolas con menor número de accidentes y víctimas mortales, mejorando la posición del año anterior.

"No debemos olvidar que un accidente grave en la carretera siempre es una gran tragedia, una familia destrozada y un fracaso para todos aquellos que tenemos la responsabilidad de cuidar de la seguridad de los ciudadanos. Siempre me han oído hablar de tolerancia cero con los accidentes de circulación, y hay que seguir trabajando, porque queda mucho camino. No podemos bajar la guardia", ha aseverado el delegado de Gobierno.

Doble sentido

Ibáñez ha detallado que la gran mayoría de los accidentes mortales se produjeron en carreteras de doble sentido de circulación. nueve fueron en carreteras nacionales y cinco en carreteras autonómicas, frente a los cuatro registrados en autovía.

Los fallos humanos siguen siendo la razón de la casi totalidad de los accidentes con víctimas mortales. Así, se sucedieron 6 salidas de vía, generalmente por distracciones o velocidad inadecuada; 6 debido a colisiones; en 3 casos las víctimas cayeron de la moto que conducían y 2 víctimas no llevaban puesto el cinturón de seguridad.

Ibáñez también ha resaltado que fallecieron dos mujeres en las carreteras, cuando representan el 40% de los conductores en Cantabria.

Los meses con más accidente mortales fueron octubre (4) y mayo, junio y septiembre con 3 cada uno. Los días de la semana con mayor número de accidente son viernes, sábado y domingo, con 4 cada uno, mientras que no hubo ningún accidente mortal en lunes. Y en cuanto al horario, entre las 8.00 y las 20.00 horas se produjeron 13 accidentes mortales.

Causas del descenso

Ibáñez ha atribuido este descenso a la puesta en marcha de las Autovías del Cantábrico y de la Meseta, así como a mejora del resto de las carreteras nacionales y autonómicas, y a la modernización del parque de vehículos.

También ha resaltado el "cambio de comportamiento" de los conductores, junto a la labor de vigilancia de los cuerpos de seguridad y las reformas legales y penales o la implantación del carné por puntos.