Efectivos de la Guardia Civil detuvieron a cinco personas y se incautaron de sustancias estupefacientes en una operación con la que se considera desmantelado un punto de venta y distribución de cocaína, hachís y marihuana en el sur de la provincia de Ávila, que afectaba a las provincias de Toledo y Cáceres.

Bajo el nombre de 'Operación hogaza', el trabajo de investigación se inició a finales de año, cuando se detectó que a la localidad abulense de Candeleda llegaba la cocaína y el hachís desde Talavera de la Reina (Toledo), y la marihuana era cultivada en la propia localidad. También llegaba cocaína desde Navalmoral de la Mata (Cáceres), aunque esta se vendía en otros puntos de venta diferentes.

De los cinco detenidos, dos de ellos son vecinos de Candeleda, si bien no se ha facilitado su identidad, informaron a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.

Uno de los individuos poseía en su casa una dependencia a modo de invernadero para cultivar marihuana, en la que contaba con focos, calefactores, extractores y ventiladores, además de abonos y fertilizantes, y donde había 70 plantas.

En total, en los registros de la operación se incautaron 138 gramos de cocaína, que podrían haberse vendido por importe de 13.000 euros; 47 gramos de sustancia de corte para cocaína, útiles para envasar papelinas, 223 gramos de hachís y una báscula de precisión.

Junto a ellos había 100 gramos de cogollos de marihuana, 1.260 gramos de plantas y ramas secas de marihuana, 300 gramos de cogollos secos de marihuana, bolsas monodosis dispuestas para su envasado, siete picadoras de marihuana, 3.020 euros supuestamente procedentes de la venta, un revólver del calibre 32 sin numeración con su munición, así como diversa documentación relacionada.