El Consell estima que el gasto de los consumidores en las rebajas de invierno en la Comunitat Valenciana será de 450 millones de euros, dado que cada valenciano dedicará una media de entre 80 y 90 euros a productos de equipamiento personal, como textil, calzado y complementos, según se desprende de los estudios realizados por la Dirección General de Comercio.

En un comunicado, el vicepresidente primero del Consell y conseller de Industria, Comercio e Innovación, Vicente Rambla, ha valorado estas cifras, por considerar que manifiestan "una leve activación del consumo, clave para la recuperación de la economía de la Comunitat Valenciana".

Rambla ha destacado que, "en un año marcado por la crisis económica y con medidas drásticas por parte del Gobierno como el incremento del IVA", es "importante" para el comercio que se produzca "un buen funcionamiento de la campaña de rebajas".

Así, ha remarcado la relevancia de las ventas registradas en este periodo, ya que "entre un 10 y un 12 por ciento del gasto en equipamiento personal se hace en la temporada de rebajas de invierno".

Rambla ha resaltado que la Comunitat "cuenta con un comercio moderno y competitivo que está haciendo frente de manera decisiva a la crisis económica actuando de locomotora de otros sectores productivos".

Según han indicado las mismas fuentes, este periodo de rebajas será previsiblemente el último antes de que entre en vigor la nueva normativa de Comercio Valenciano, cuyo proyecto de ley ya ha sido remitido a las Corts Valencianes tras aprobarse en el último pleno del Consell.

El vicepresidente ha subrayado que esta norma "busca la creación de empresas y la generación de empleo por lo que no contará con exigencias previas para la creación de nuevos establecimientos, sino con un control y un seguimiento posterior", de modo que "solamente las superficies comerciales por encima de los 2.500 metros cuadrados necesitarán una autorización previa".

Rambla ha apuntado que, por este motivo, "se agilizarán los trámites administrativos para agilizar la creación de nuevos comercios y oportunidades de negocio, puesto que uno de los objetivos principales de esta nueva normativa es la generación de empleo".

Ha valorado asimismo que esta ley "garantiza la continuidad de los comercios a través de un marco normativo estable y acorde con las exigencias del sector comercial de la Comunitat Valenciana".

También ha demandado a los grupos políticos de las Corts Valencianes que alcancen "el mismo consenso logrado en la elaboración de este proyecto de ley del Comercio, que fue presentado en el seno del Observatorio del Comercio".

En este sentido, ha recalcado que se trata de una norma que "ha sido trabajada y consensuada con las asociaciones de comerciantes y consumidores hasta conseguir un documento que recoge todas las sensibilidades de los agentes que forman parte de la distribución comercial".

Nueve aperturas en festivos

El proyecto aprobado amplía de ocho a nueve las apertura en festivos comerciales en la Comunitat Valenciana y además, deja a los ayuntamientos la posibilidad de modificar dos de esos festivos, en función de sus festividades locales.

La ley también realiza una "apuesta decidida por el comercio urbano", ya que la Generalitat "promoverá la dinamización y mejora de los entornos comerciales urbanos", han resaltado las mismas fuentes, quienes han apuntado que "por primera vez, en la legislación valenciana se reconoce la figura de los Centros Comerciales Urbanos".

Por último, la norma recoge de manera novedosa las ventas de excedentes de producción o de temporada, que suelen encontrarse en los locales habitualmente conocidos como 'outlets' o en secciones dentro de un establecimiento, en cuyo caso deberán estar claramente diferenciadas del resto de artículos del local. En cualquier caso, señala que la oferta de estos productos se realizará aplicando una reducción evidente de su precio de mercado.