El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, ha presidido este viernes la firma de un convenio de colaboración con las diputaciones provinciales de Huesca, Zaragoza y Teruel, por el que se invertirán casi cuatro millones de euros para impulsar la formación en zonas rurales a través de las tecnologías de la información y la comunicación, con acciones formativas a distancia mediante la teleformación en municipios de menos de 20.000 habitantes.

El consejero de Economía, Hacienda y Empleo del Ejecutivo aragonés, Alberto Larraz, ha firmado este acuerdo con los presidentes de las diputaciones de Zaragoza, Huesca y Teruel, Javier Lambán, Antonio Cosculluela y Antonio Arrufat, respectivamente.

Este convenio impulsará la contratación de doce agentes TIC que trabajen en las localidades y promoverá acciones formativas mediante teleformación, para facilitar la inserción laboral y favorecer la adaptación de los trabajadores a los cambios tecnológicos.

El presidente aragonés, Marcelino Iglesias, ha destacado que este acuerdo incide en la "línea de las nuevas políticas activas de empleo" y en la formación de las personas en situación de desempleo, en un proyecto "pionero" gracias al que los aragoneses podrán acceder "a más de 50 especialidades formativas" a través de Internet.

Se trata, además, de "un ejercicio de colaboración muy importante" entre el Ejecutivo y las diputaciones "en un tema que nos preocupa y que es nuestra prioridad fundamental" como es el desempleo, ya que la teleformación ofrecerá "más oportunidades para nuestros trabajadores", ha subrayado Iglesias.

En este sentido, ha recordado que en esta Comunidad autónoma "tenemos seis puntos menos de desempleo" que en el conjunto del país, con un 14 por ciento, unos datos "mucho mejores que la media, pero que no nos pueden dejar satisfechos".

"Tenemos que trabajar para volver a la situación de pleno empleo que tuvimos hace dos años", propiciando políticas activas y de formación, en proyectos "como éste" que es "extraordinariamente positivo para que nuestros trabajadores puedan acceder en mejores condiciones" al mercado laboral, ha remarcado, al vaticinar que en la segunda mitad de este año "crearemos algo de empleo neto" y en 2012 y 2013 "tendremos un crecimiento importante y las personas con más formación tendrán más posibilidades".

Esfuerzo en formación

El presidente de la DPZ, Javier Lambán, ha agradecido y felicitado al Gobierno de Aragón por mantener e impulsar estas acciones en un momento de crisis económica en el que los esfuerzos en formación y empleo "no sólo producen efectos cuantitativos sino cualitativos" en la sociedad.

En su opinión, "la crisis ha tocado fondo en Aragón, esperamos que en 2011 la superación de la crisis se traduzca en creación neta de empleo" y para conseguirlo "debemos eliminar los obstáculos debidos a la falta de formación" de los trabajadores. Por tanto, "esta iniciativa cae como agua de mayo sobre el problema del desempleo", ha valorado Lambán.

Por su parte, el presidente de la DPH, Antonio Cosculluela, ha expresado su "satisfacción" por firmar este convenio de colaboración que permite desarrollar políticas activas de empleo en el territorio, en este caso basadas en las nuevas tecnologías. Cosculluela ha explicado que el pasado año 2010 se beneficiaron de este programa casi 400 personas en la provincia oscense, un 60 por ciento mujeres.

Por último, el presidente de la DPT, Antonio Arrufat, ha destacado las posibilidades que este acuerdo ofrece en las zonas rurales de la provincia de Teruel y en la lucha contra la despoblación, para afirmar que desde la institución provincial "apostamos por esta vía".

Agentes tic y teleformación

Según el acuerdo de colaboración firmado, el Ejecutivo aragonés, a través del Instituto Aragonés de Empleo, financiará la contratación de doce agentes TIC —cuatro por provincia— que desarrollarán su labor en municipios de menos de 20.000 habitantes, con un presupuesto de 456.000 euros, 152.000 para cada una de las diputaciones.

Esta iniciativa se suma a los 3,5 millones de euros que la Comunidad autónoma destina a acciones formativas a distancia mediante teleformación, que también se imparten en zonas rurales, y que se integran en el Plan de Formación e Inserción Profesional de Aragón para 2010.

Este programa, denominado 'Formación para el Empleo en zonas rurales utilizando NTC (Nuevas Tecnologías de la Comunicación)', está incluido en el Programa Operativo FSE de la Comunidad autónoma de Aragón 2007-2013 y está cofinanciado por la Unión Europea.

El programa de formación, que se inició en el 2009, está dirigido a trabajadores ocupados y desempleados, residentes en localidades de menos de 20.000 habitantes y se apoya en dos pilares fundamentales. En primer lugar, en cursos que imparte el INAEM, diseñados para fomentar y mejorar actividades generalmente asociadas a recursos existentes en el territorio.

Así, se incide en la gestión del patrimonio cultural, comercio electrónico, alojamientos turísticos, monitor de tiempo libre, implantación de sistemas de calidad, gestión de recursos forestales o elaboración de catálogos.

Estos cursos se desarrollan mediante teleformación con tutorías, sesiones presenciales y sesiones prácticas. Las clases son de entre 100 y 250 horas de duración para un máximo de 30 alumnos. En el año 2009, el Gobierno de Aragón destinó 1,7 millones a la realización de los cursos, que estaban diversificados en 42 especialidades.

La convocatoria de finales del 2010, y cuyos cursos se inician este mes de enero, ha sido un 106 por ciento superior ya que cuenta con un presupuesto de 3,5 millones y más de 60 especialidades distintas. El Instituto Aragonés de Empleo estima que un total de 2.400 alumnos podrían formarse gracias este programa.

Técnicos en el territorio

En segundo lugar, el otro punto de apoyo del programa de formación son los agentes TIC, cuatro por cada una de las diputaciones provinciales. El objetivo es hacer de ellos técnicos ubicados en el territorio.

Su misión consiste en proporcionar formación en tecnologías de la comunicación y la información a los participantes de los cursos que no dispongan de ella; solucionar los problemas informáticos de los alumnos en el desarrollo del curso; y animar y motivar en la realización de la acción formativa.

También trabajan para favorecer el establecimiento de grupos de trabajo en red sobre las materias del curso; identificar los interesados en proyectos de autoempleo; favorecer los encuentros y la participación en foros de los participantes de los cursos y de los tutores de formación a distancia; colaborar con los centros que impartan las acciones formativas y con los gestores del INAEM en la captación de alumnos, selección y seguimiento; y destacar las necesidades de formación para el empleo de las zonas rurales.