En ese sentido, el dirigente de LAB destacó que, desde un punto de vista político, "la situación actual en Euskal Herria sigue arrojando esperanzas", ya que "se están dando pasos en la buena dirección" y se está avanzando para "construir los pivotes sobre los cuales se tiene que edificar un proceso de diálogo y negociación y soluciones políticas".

Por ese motivo, consideró que "no debemos fijarnos tanto en las cuestiones estáticas, coyunturales, con las lecturas que pueda hacer cada cual", sino "estar convencidos, y desde luego la izquierda abertzale y LAB está trabajando en esa dirección, de que podemos construir un futuro en clave de paz".

Pasos importantes

Díez aseguró que, viendo la situación "con perspectiva", en el 2005 "se han dado pasos importantes en la dirección adecuada", aunque con "muchas inercias del pasado" y con "los condicionamientos y el chantaje", aseveró, "del PP y del ámbito judicial y mediático".

El secretario general de LAB resaltó el hecho de que "se está hablando de una mesa de partidos" y de "un nuevo marco jurídico y político" y estimó que en el año 2006 se puede entrar en una "fase determinante" del proceso, aunque para ello "la política de voluntades y de discursos debe aterrizar en compromisos sólidos" y no "gaseosos".

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