El Banco de Alimentos de la Costa del Sol (Bancosol) ha distribuido unos cuatro millones de kilogramos de alimentos durante el año que acaba de terminar, procedentes de empresas españolas que donan sus excedentes, de campañas que realiza la propia ONG y también de los fondos FEGA y FAGA. Se ha experimentado, por tanto, un incremento aproximado del 14 por ciento respecto al ejercicio de 2009.

Los alimentos se han repartido entre cerca de 220 asociaciones benéficas, atendiendo aproximadamente a 50.000 personas, lo que supone un aumento de cerca del 25 por ciento respecto a 2009, en el que se beneficiaron de estas ayudas unos 40.000 individuos, según ha indicado a Europa Press el presidente de Bancosol, Javier Peña.

Normalmente, desde Bancosol se atendía a personas con problemas debidos a cuestiones como "la especialización en el campo laboral, la marginación provocada por la droga o la delincuencia o la inmigración", ha precisado Peña; sin embargo, ahora se suman otros individuos afectados por la situación de crisis, que han perdido su trabajo y que, debido a su edad, tienen dificultades para encontrar un nuevo empleo, y jóvenes, que no pueden acceder al mercado laboral. Se trata de hogares normalizados que hasta ahora no habían tenido dificultades económicas serias y pagaban sin problemas sus facturas.

Ha advertido, por ello, de que la estimación es que la demanda por parte de personas con dificultades aumente durante 2011, incluso, superando los 10.000 individuos que ha habido de diferencia entre 2009 y el año pasado. "Las necesidades están subiendo", ha resaltado Peña, entre otros motivos, por "la crisis económica, el incremento del desempleo y la finalización de las ayudas sociales".

"El año 2010 ha sido muy difícil y nos hemos visto bastante presionados porque la situación se ha ido deteriorando, en tanto que el número de personas afectadas por la crisis ha ido aumentando", ha declarado el responsable de Bancosol, quien, no obstante, ha destacado un aspecto positivo de todo esto, y es que la gente está más sensibilizada porque "es consciente de que le puede tocar en cualquier momento". "No es que todo el mundo sea solidario, pero sí es cierto que la solidaridad está ganando puntos y la población está siendo más consecuente", ha asegurado.

Por ello, ha subrayado la necesidad de "trabajar más unidos" para que todas las zonas de Málaga y su provincia tengan al menos un punto de atención por parte de Bancosol. Así, ha apostado por los equipos de trabajo con los que esta ONG cuenta fuera de la capital, tales como Marbella, Vélez-Málaga, Ronda y Antequera.

De los alimentos distribuidos durante el año pasado, 1,6 millones de kilos procedían del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) y 150.000 kilogramos del Fondo Andaluz de Garantía Agraria (FAGA). Asimismo, en 2010 Bancosol ha contado, respecto a 2009, con aproximadamente un 15 por ciento más de empresas —unas 250— que han ayudado de forma habitual aportando sus excedentes de verdura fresca, dulces, zumos, arroz, alubias, carne o conservas, entre otros productos. CHEQUES-

Menú y lote familiar

Peña ha mencionado, asimismo, proyectos llevados a cabo durante 2010 para ayudar a personas con dificultades económicas por los efectos de la crisis, entre los que se encuentra la iniciativa cheque-menú, desarrollada con Unicaja y diversas ONG, que terminó el pasado mes de junio y que supuso la distribución de unos 9.000 menús durante ese periodo.

Ahora está en marcha la campaña Lote Familiar, con la que se reparten cajas con 20 kilos de alimentos básicos —leche, aceite de girasol, arroz, lentejas, garbanzos, alubias, pasta alimentaria, tomate frito, café, cacao y azúcar— para atender a familias necesitadas de toda la provincia. Desde su puesta en marcha en junio se ha distribuido una media de 20 toneladas mensuales para aproximadamente 500 familias.