El líder del PSdeG, Manuel 'Pachi' Vázquez, y el portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, han coincidido en que el Gobierno gallego está "perdido" y carece de "proyecto" para superar las dificultades que afronta Galicia, un extremo con el que discrepa el conselleiro de Presidencia y secretario general del PPdeG, Alfonso Rueda, quien ha defendido "sin triunfalismos" la gestión de la Xunta en un 2010 "condicionado por la crisis".

"Este 2011 tiene una connotación especial, la entrada del Gobierno del PP en el ecuador de la legislatura y la conclusión, al cierre de 2010, de que Alberto Núñez Feijóo no tiene un proyecto para salir de la crisis, sino que hunde a Galicia en el récord de desempleo", ha señalado, en declaraciones a Europa Press, Pachi Vázquez. En la misma línea, Guillerme Vázquez ha identificado 2010 "con un año perdido".

Frente a ello, Rueda ha replicado que sería "un error" adoptar una postura "triunfalista" y obviar las consecuencias de la crisis, pero ha insistido en que la Xunta a adoptado medidas "positivas". "Han pasado cosas buenas", ha añadido, ejemplificando con los resultados del Xacobeo o el nacimiento de Novacaixagalicia, así como con acciones del Gobierno como el concurso eólico.

Por su parte, los principales partidos de la oposición en Galicia han alertado del "deterioro" de las políticas sociales. "Ya no se habla de dependencia y el pasado año fue el de mayor caída de la inversión en obra pública", ha apuntado Pachi Vázquez, convencido de que 2010 cierra un ciclo en el que los gallegos han perdido sus "ilusiones" al ver que Feijóo "incumplió" sus promesas electorales.

"La Xunta está escondida ante la crisis", ha reprobado, en la misma línea, el portavoz nacional del BNG. Muy crítico con las medidas de "corte ideológico" adoptadas por el Gobierno autonómico, Guillerme Vázquez ha alertado de su "ataque frontal al gallego" y de sus actuaciones "privatizadoras", como ocurre, ha ejemplificado, en la construcción de infraestructuras sanitarias.

Fusión de cajas

Pese a las críticas de la oposición, Alfonso Rueda se ha mostrado orgulloso por el trabajo hecho por el Ejecutivo autonómico, sobre todo en la negociación para la fusión de Caixa Galicia y Caixanova. "El papel de la Xunta fue fundamental", ha proclamado el conselleiro de Presidencia, si bien ha resaltado que en proceso intervino "mucha gente".

Más "complicada", ha sido, a su juicio, la posición adoptada por la oposición en el proceso, sobre todo en el caso del PSdeG, puesto que el BNG sí mantuvo —ha señalado— "una postura de país". Al respecto, Guillerme Vázquez ha recordado que fue precisamente su formación la que "tomó la iniciativa" en la defensa de la fusión, aunque se ha mostrado crítico "con el resultado final".

"Avalábamos la fusión, pero también una nueva ley de cajas que permitiese más transparencia y el resultado final no nos convence; además, los peligros de bancarizar las cajas siguen ahí y no podemos desconocer que PP y PSOE tienen un acuerdo de fondo a través de la modificación de la Ley sobre Órganos Rectores de las Cajas de Ahorro (Lorca), con una dirección que no compartimos", ha argumentado.

Por su parte, el líder del PSdeG ha censurado el "errático" papel de Feijóo en el proceso y ha ironizado al apuntar que pasó de pedir un informe a Facenda "para cesar" a Julio Fernández Gayoso a "proponerlo como presidente" de la nueva entidad. En el polo opuesto, ha situado la postura de los socialistas buscando "un espacio común" en el que "todos" los agentes implicados pudieran trabajar.

Ausencia de zapatero en el xacobeo

Por otra parte, si oposición y Xunta discrepan en la evaluación del trabajo hecho en Galicia en 2010, lo mismo ocurre en lo que se refiere al papel que ha jugado el Ejecutivo estatal que, según Pachi Vázquez, "continúa batiendo el récord de inversión en Galicia".

Peor valoración ha hecho Alfonso Rueda, quien ha lamentado la "ausencia" del presidente José Luis Rodríguez Zapatero en todo el Año Xacobeo con "todo su simbolismo". Esta decisión, en su opinión, evidencia "lo que importa" al Estado una Comunidad como Galicia en la que no hay una "mayoría" de votantes socialistas.

En todo caso, el conselleiro de Presidencia ha admitido que Galicia "necesita y quiere tener buenas relaciones" con el Gobierno central. "Y en eso nos vamos a aplicar en 2011", ha garantizado, antes de manifestar su deseo de que la actitud del Gobierno central "cambie" para que sea posible "llevarse bien" puesto que —ha esgrimido— "nadie quiere confrontar porque sí".

Por su parte, el portavoz nacional del BNG ha lanzado duras críticas para un Gobierno central "a la deriva" que hace "la política de la derecha". Así, ha denunciado que, en 2010, ha adoptado medidas "inaceptables" que dejan al PP "sin necesidad siquiera" de buscar "una alternativa" porque es ya el propio Zapatero el que actúa "para dar satisfacción a los grandes especuladores".

Labor de oposición

Con respecto al trabajo de sus respectivos partidos, los líderes de PSdeG y BNG se han mostrado satisfechos con la labor de oposición ejercida y han destacado las buenas expectativas con las que concurren sus formaciones a las elecciones municipales del próximo 2011. "Afrontamos el próximo año con esperanza y con el compromiso de seguir tomando partido frente a las políticas antisociales de la Xunta", ha defendido Guillerme Vázquez.

Por su parte, el jefe de filas de los socialistas ha erigido a su formación "en la alternativa al PP" y, pese a las disputas internas que han marcado el fin de año en el PSdeG, se ha mostrado satisfecho de que "por fin vaya a materializarse" la premisa de 'un hombre, un cargo'. "Más allá de turbulencias, hemos hecho una oposición rigurosa y creo que, cada día que pasa, todos los militantes de Galicia ven que no andamos con medias tintas", ha concluido.

Sobre la relación del Gobierno con PSdeG y BNG, Alfonso Rueda ha subrayado que es "difícil" trabajar con una oposición "dividida" y que "no tiene una línea clara de acción", refiriéndose, "sobre todo", al caso de los socialistas gallegos. "Su bandazos lo hicieron muy difícil", ha remarcado, antes de desear que 2011 sea el año en el que resuelvan "sus problemas internos".

Reforma del estatuto

Por último, preguntado por si Núñez Feijóo cumplirá su compromiso de llamar a los líderes de PSdeG y BNG para estudiar si hay clima en 2011 para retomar los trabajos de reforma del Estatuto de Autonomía, el conselleiro de Presidencia ha asegurado que "lo va a hacer". Eso sí, ha matizado que los ciudadanos tienen "otras prioridades" como luchar contra la crisis y el paro, dos extremos en los que la Xunta centrará sus fuerzas en el nuevo año.

Al respecto, PSdeG y BNG han coincidido en que ni al PP ni a Núñez Feijóo les "interesa" abordar la modificación del texto estatutario ni profundizar en el autogobierno. "A Feijóo le puede más la orden de Rajoy —su jefe de filas en el PP, Mariano Rajoy— de que no toca hablar de Estatutos que el aumento de derechos y de financiación que iría ligado a una reforma del texto gallego", ha lamentado Pachi Vázquez.