Por este motivo, los servicios de seguridad del campus patrullan ahora con mayor intensidad como medida preventiva. Además, en colaboración con el consejo de alumnos, están diseñando unas guías para conseguir un acceso más seguro a esta zona de estudio. Se trata de marcar los trayectos más iluminados y con mayor tránsito de estudiantes.
Es una de las iniciativas contempladas en la nueva campaña de seguridad del campus, que bajo el nombre Con tu ayuda cuidamos mejor lo tuyo, empezó a funcionar a principios de semana.
Desde el lunes, en todos los edificios se reparten unos trípticos con recomendaciones que inciden en no dejar objetos personales de valor a la vista, ni en los coches, ni en la biblioteca, respetar las normas de circulación y aparcamiento y avisar a los vigilantes ante cualquier presencia sospechosa, sobre todo, en horario nocturno.
Decálogo de protección
Aunque, según fuentes policiales, los incidentes en el campus son casi inexistentes (algunos hurtos de calculadoras, móviles y portátiles) en comparación con las poblaciones que la circundan, el campus también publicará, en breve, un decálogo de prácticas domésticas de protección, aprobado ya por la comisión general de seguridad. Y para que los estudiantes recuerden el teléfono al que deben llamar en caso de incidencias desagradables: 965 909 656.
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