El Gobierno de Canarias espera resolver este sábado 18 de diciembre el recurso presentado al concurso del servicio de hemodiálisis en el Hospital Universitario de Gran Canaria y el Hospital Doctor José Molina Orosa de Lanzarote, aunque lo condiciona a "la seguridad jurídica".

El servicio fue adjudicado provisionalmente a la empresa Lifeblood por 31 millones de euros en cinco años prorrogables hasta los 125 millones en tres lustros. Dicha compañía ha presentado alegaciones al recurso interpuesto por la actual concesionaria, Baxter.

En rueda de prensa en la capital grancanaria tras el Consejo de Gobierno, el portavoz y viceconsejero de Comunicación del Ejecutivo canario, Martín Marrero, afirmó que los servicios jurídicos generales de la comunidad autónoma y de la Consejería de Sanidad están trabajando con el objetivo de resolver dicho asunto en el plazo del 18 de diciembre.

No obstante, admitió que "en asuntos de calado el Gobierno prefiere siempre anteponer la seguridad jurídica a la velocidad". "Es un asunto bastante complejo desde el punto de vista no sólo jurídico sino económico", subrayó Marrero, que incidió que en "se continúa trabajando con la idea de resolver el día 18, pero siempre bajo la premisa de la mayor solidez jurídica en esa resolución".

"Por haber precipitación no puede haber una debilidad jurídica al resolver el recurso planteado por la empresa Baxter contra Lifeblood", concluyó.