Málaga ha registrado un descenso del 28,1 por ciento en las contrataciones llevadas a cabo en la provincia entre 2007 y 2009, lo que supone que, en estos tres años, se han dejado de realizar un total de 210.000 contratos, afectando, especialmente al colectivo masculino ya que, de esta cifra total, el 69 por ciento se corresponde con contratos que no se han efectuado a hombres, frente al 31 por ciento en las mujeres.

Otro de los colectivos en los que más ha repercutido esta bajada ha sido el de jóvenes menores de 30 años, pues representa el 67 por ciento, cifra que desciende al 25,7 por ciento en las personas de entre 30 y 45 años y al 7,3 por ciento en los más de 45 años, según ha explicado el responsable del Gabinete Técnico de CCOO, Antonio Turmo, quien ha apuntado que el sector donde más se ha dejado de contratar ha sido en servicios —50,5 por ciento— y construcción —46 por ciento—, mientras que en agricultura e industria estos datos bajan al dos por ciento y al 1,5 por ciento, respectivamente.

Esta reducción de la contratación entre 2007 y 2009 ha sido más acentuada en Málaga capital —46,4 por ciento— y la Costa Occidental —39,4 por ciento—, mientras que en la Comarca de la Axarquía ha sido del 7,2 por ciento; en el Guadalhorce, del 4,2 por ciento; en el interior de la provincia, del 1,8 por ciento; y en el municipio de Ronda, del uno por ciento, según se desprende del informe 'La contratación en Málaga 2007-2010', presentado este lunes por Turmo y el secretario provincial de CCOO, Antonio Herrera.

Turmo ha asegurado que la temporalidad es "el principal problema" de la contratación en la provincia de Málaga. En este sentido, ha especificado que, en cuanto al tipo de jornada, la contratación se reduce fundamentalmente en contratos de tiempo completo —92 por ciento—, mientras que los contratos temporales han supuesto un 85 por ciento, los indefinidos un 13,2 por ciento y los formativos un 1,8 por ciento.

Así, ha destacado el "abusivo" crecimiento de la contratación a tiempo parcial, ya que se pasa de un 25,1 por ciento en 2007 a un 32,8 por ciento en 2010. Según han explicado, éste es un comportamiento "discriminatorio" ya que perjudica sobre todo a las mujeres —aunque también a los jóvenes— y que "tiene su repercusión en el salario", pues en 2009 la diferencia entre el sueldo medio de los hombres —18.000 euros— con respecto al de las mujeres —13.000 euros— era de unos 5.000 euros.

Turmo ha apuntado que la temporalidad tiene relación con el salario medio anual, puesto que la provincia que tiene "mayor temporalidad, tiene menos salario". En relación con ello, ha indicado que Málaga ocupa el puesto número 38 del total de las provincias españolas en relación al salario medio anual, es decir, hay 37 provincias con un sueldo superior al de Málaga.

Los líderes sindicales han precisado que existe un aspecto que influye especialmente en el índice salarial como es el modelo productivo de la provincia pues, según han explicado, aquel modelo que "tiene bajo valor añadido en sus actividades, retribuye peor a sus empleos", por ello, han subrayado la necesidad de diversificar el modelos productivo malagueño, que tiene "escasa inversión y genera poco valor añadido", al tiempo que han lamentado que se "ha abandonado la investigación y los nuevos nichos de empleo".

Relación entre tipo de trabajo y formación

Desde CCOO también han informado de que los contratos por nivel formativo también han bajado, correspondiéndose más de la mitad de ellos, un 66,4 por ciento, con estudios primarios y Educación Secundaria Obligatoria (ESO); el 14,8 por ciento, a sin estudios primarios; el 14,3 por ciento, a Bachillerato y Formación Profesional, y el 4,5 por ciento, a educación universitaria.

Así, han asegurado que "hay muchas personas que aún teniendo educación superior están trabajando en ocupaciones inferiores", lo que demuestra que "nuestro modelo productivo exige poca cualificación y muchos trabajadores cualificados malagueños están emigrando de la provincia para buscar un empleo mejor". Este "desajuste educativo" entre la formación y la cualificación exigida provoca "despilfarro de recursos".

Prueba de ello, señala el informe presentado por la organización sindical, es que entre las 10 ocupaciones más contratadas en la provincia aparece limpieza, peones, camareros y administrativos, suponiendo, la mayoría de éstas el 57,3 del total de la contratación. No ha ninguna ocupación con nivel superior entre las más destacadas, apunta el documento. En este punto, los representantes sindicales han lamentado que se esté "desaprovechando el potencial de nuestros trabajadores, ya que están emigrando" para buscar empleo en otros puntos geográficos.

En cuanto al índice de rotación —el número de contratos que puede tener una persona al cabo de un año— en la provincia de Málaga, esta cifra es de un 2,05 por ciento, es decir, se han realizado 517.882 contratos en 2009 con los cuales se han dado trabajo a 252.291 personas, tal y como ha señalado Turmo, quien ha explicado que al menos 1.707 personas tuvieron en 2009 más de 15 contratos en tan solo un año. CRÍTICAS

El responsable sindical en Málaga ha criticado que esta mayor destrucción de empleo se produce porque "ni el Gobierno del Partido Popular ni del PSOE en el momento de crecimiento económico han renunciado a hacer una política fiscal anticíclica y, por otro lado, no se han preocupado ni en invertir ni en diversificar el modelo productivo".

Además, han denunciado que los empresarios, "de manera alegal e ilegal, se han aprovechado de un abuso de la propia contratación temporal como consecuencia de que el modelo productivo era proclive a la propia temporalidad", lo que han calificado de "una abusiva temporalidad sin excusa". Ello ha estado acompañado con "la tolerancia del PP y PSOE al no haber permitido un crecimiento de la inspección laboral que permita sancionar todo esto".