El ministerio público ha solicitado una pena de 13 años y tres meses de prisión para un preso de la cárcel coruñesa de Teixeiro por un delito de robo con allanamiento de morada y otro de agresión sexual, cometidos durante un permiso penitenciario. En el juicio, celebrado en la Audiencia Provincial de A Coruña, el procesado se declaró culpable.

El hombre, de iniciales S.R.F., está acusado de aprovechar un permiso penitenciario, el 11 de mayo de 2007, para entrar a robar en una vivienda de Oseiro, en el municipio coruñés de Arteixo, a la que accedió a través de una ventana de la cocina. Una vez en el interior, se hizo con unas llaves de la casa y esperó a la víctima.

Según el fiscal, a su llegada, la mujer se lo encontró con la cara tapada con un pasamontañas y portando un cuchillo de 25 centímetros. La Fiscalía sostiene que le tapó los ojos y le ató las manos, además de introducirle en la boca un paño. Posteriormente, según la calificación fiscal, tras robarle el dinero del bolso, la llevó a un monte cercano donde consumó la violación.

Por los delitos de robo y agresión sexual, además de allanamiento de morada, el fiscal solicitaba, inicialmente, una pena de 15 años de prisión, que, en sus conclusiones finales, rebajó a 13 años y 3 meses. También reclamó el pago de una indemnización de unos 18.000 euros por las lesiones y daños morales sufridos por la víctima, así como por el robo del dinero.

Según el fiscal, la víctima padece una ansiedad fóbica con "miedo persistente a determinadas situaciones, lugares y personas", que le lleva a evitar a gente, lo que le impone limitaciones en su vida.

Alegato del acusado

En el juicio, el acusado que ya había sido condenado a 18 años de cárcel por cometer diversos robos, se declaró culpable y asumió todos los hechos que se le imputan. "Como no creo en la Justicia me da igual", afirmó el procesado a preguntas del juez sobre su decisión de declararse culpable.

Por su parte, la víctima ratificó su declaración tras los hechos, al igual que una hermana suya, a la que acudió para pedir ayuda y con la que se trasladó al Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) para que la examinasen. En el juicio, el abogado de la defensa también se mostró conforme con la pena solicitada por el fiscal, tras la rebaja de la misma.