España se convertirá esta semana en el primer país de Europa por kilómetros de ferrocarril de Alta Velocidad (AVE) en servicio, con 2.665 kilómetros, gracias a la puesta en marcha de la línea Madrid-Valencia y su conexión con Cuenca.

Así lo destacó el ministro de Fomento, José Blanco, quien, en declaraciones a la Cadena Ser, recogidas por Europa Press, garantizó la "rentabilidad" del AVE.

En esta línea subrayó que, además de un modo de transporte "rentable y rápido", es también "seguro y limpio". Según los estudios realizados por el Ministerio, la puesta en marcha de esta línea puede contribuir a reducir los accidentes mortales de tráfico en unas 250 personas al año y evitar la emisión de 150.000 toneladas de CO2 a la atmósfera.

Con todo, el titular de Fomento garantizó que España contará con una de las redes de transportes más competitivas de España. "En este momento es nuestra fortaleza. Una fortaleza que tiene importancia estrategia para el país por lo que representa para su desarrollo económico y las posibilidades que ofrece para las empresas", destacó Blanco.

"Gracias al desarrollo tecnológico que se ha hecho en el país, nuestras empresas están liderando en todo el mundo el sector de la construcción y el desarrollo del AVE", destacó el ministro, quien confesó sentirse "orgulloso" de los contratos millonarios que las firmas españolas están consiguiendo en los últimos meses en todo el mundo.