Este títere, conocido por millares de niños por anteriores espectáculos, es un antihéroe, pero su astucia le permite salir airoso de las aventuras más difíciles. Pelegrín convertirá la representación en un ir y venir y, con la ayuda de los más pequeños, resolverá todos los conflictos que se le presenten. El protagonista es un muñeco aventurero y pendenciero, feo pero atractivo, que resuelve sus entuertos abriendo la cabeza a la gente con su cachiporra, no para hacerles daño, sino para hacer que les entren las ideas. A partir de tres años.