La Asociación de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales y Malos Tratos de Valladolid (Adavasymt), a través de la letrada Doris Benegas, ha calificado hoy de "sangrante" el caso de un hombre que ha sido denunciado por su ex esposa por abusar de los dos hijos menores de ambos y a quien, sin embargo, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer ha otorgado la custodia de los dos menores.

La situación ha llegado a tal extremo que miembros de Adavasymt, entre ellos la referida letrada, su presidenta, Conchi Minayo, y la psicóloga María José Juárez, han comparecido hoy públicamente ante los medios de comunicación para tratar de evitar la entrega de los niños a su supuesto agresor, algo que podría ocurrir en las próximas horas o en todo caso antes del lunes, en ejecución de una decisión adoptada por el Juez de Violencia Contra la Mujer.

Este juez fue quien archivó la denuncia por malos tratos que en noviembre de 2009 interpuso la madre contra su ex marido y el mismo en el que recayó poco antes del verano una segunda denuncia mucho más grave, en este caso por supuestos abusos y agresiones sexuales que su entonces pareja habría cometido sobre los dos hijos de ambos, una niña de 15 años y un niño de 7, fundamentalmente sobre éste.

"En esa denuncia hay suficientes indicios para que se inicie una investigación", ha apuntado la abogada Doris Benegas, quien, en declaraciones recogidas por Europa Press, ha mostrado su indignación por el hecho de que el juez instructor, dentro del procedimiento de medidas provisionales, haya concedido al propio denunciado la custodia de las supuestas víctimas.

Ante ello, la asociación ha optado por recusar al juez, al que acusa de "falta de imparcialidad" tanto en el proceso penal derivado de la denuncia por abusos sexuales como en el divorcio que se sigue en la vía civil.

"¿Cómo puede instruir objetivamente un señor que conociendo esa denuncia, y pese a los indicios que hay, lo primero que hace es otorgar la custodia al denunciado?", se pregunta la acusadora particular, quien ha precisado que en la decisión del juzgador ha pesado un informe del equipo psicosocial según el cual la madre ejerce una "mala influencia" para sus hijos y está "malmetiendo" a éstos contra el padre.

Sesiones de pornografía con el niño

Para Adavasymt, la actuación de este juzgado "contraviene los derechos de los menores, que se niegan a estar con el padre", y constituye un despropósito por cuanto ni siquiera hasta ahora se ha tomado declaración al denunciado, y eso a pesar de que la acusación particular ha aportado pruebas más que suficientes, en su opinión, de la necesidad de que los niños sean apartados de su progenitor.

Entre esas pruebas, Benegas ha incluido vídeos pornográficos, "de contenido muy fuerte y absolutamente impropio para menores", encontrados en un armario del padre y que, según ella, eran exhibidos al hijo desde hacía años, así como tickets de compra que acreditan la procedencia del material y extractos bancarios que reflejan esos pagos que se cargaban en la cuenta familiar.

La recusación del juez se ha traducido hasta el momento en la apertura de distintos expedientes que ha conocido la Audiencia Provincial, un de los cuales, el relativo a la impugnación del instructor para conocer del proceso de divorcio y las medidas provisionales, ha sido desestimado, mientras que la sala vallisoletana aún no se ha pronunciado respecto de si el recusado podrá seguir o no conociendo de la denuncia por abusos sexuales y de las correspondientes medidas.

Además, la recusación ha llevado a nombrar un juez sustituto, quien la pasada semana trató ya de ejecutar la decisión de su predecesor de que los menores sean puestos bajo la custodia del padre. Tal entrega fue impugnada por Adavasymt, de forma que ahora se ha abierto un plazo de cinco días—el colectivo desconoce si expira hoy o el lunes—para que el Ministerio Fiscal exprese su opinión respecto de si la custodia de los niños ha de ser otorgada o no a su progenitor.