Manuel Blasco, cabeza de lista del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Teruel, la lista más votada en las pasadas elecciones, ha sido elegido nuevo alcalde de la ciudad en un pleno de investidura.

Esta elección tiene lugar después de que Miguel Ferrer dimitiera a principios de noviembre de este cargo, a consecuencia de su abandono del Partido Aragonés (PAR), que gobernaba en coalición con el Partido Socialista (PSOE) en este Ayuntamiento.

Blasco va a presidir el consistorio turolense hasta la celebración de las elecciones municipales de mayo de 2011. Su candidatura ha obtenido los ocho votos de los concejales del PP, los mismos que ha recibido la candidatura de la socialista Lucía Gómez, puesto que a los siete votos de su partido se ha sumado el del ex alcalde Miguel Ferrer.

Por su parte, Partido Aragonés y Chunta Aragonesista (CHA) se han abstenido, como habían anunciado. En el pleno, también han tomado posesión de su cargo Mar Nácher y Elena Gómez como nuevas ediles del PAR, tras el abandono de su acta de concejales por ese partido de Luis Muñoz y Carmen Alonso, a consecuencia de abandono de Ferrer del PAR.

El pleno de investidura ha estado presidido por Francisco Martín como concejal de más edad —después de que Ferrer renunciara a ocupar este puesto— y ha contando como la presencia de cargos de todos los partidos políticos.

Así, han asistido la presidenta del PP-Teruel, Carmen Pobo, su secretario provincial, Carlos Muñoz, el portavoz del PP en las Cortes de Aragón, Eloy Suárez, y el presidente del PP-Huesca y diputado autonómico, Antonio Torres. También han estado presentes el presidente de la Diputación de Teruel, el socialista Antonio Arrufat, y la candidata socialista a la alcaldía en 2011, Mayte Pérez.

Además, el presidente del comité local del PAR, Miguel Ángel Gorbe y el secretario provincial de CHA, Ángel Sánchez Monzón. Asimismo, han acudido el presidente de CEOE Teruel, Carlos Mor; el de la Cámara de Comercio, Jesús Blasco, y el de la Federación de Vecinos, Isidoro Esteban.

LEALTAD

Manuel Blasco —que también es senador por el PP— ha jurado su cargo en el pleno de investidura y ha anunciado que en los próximos días se reunirá con los representantes de los grupos para ofrecerles delegaciones municipales, aunque ha pedido "lealtad" a los concejales que acepten sus responsabilidades.

El nuevo alcalde ha deseado que "la crisis política en el Ayuntamiento se zanje hoy mismo" y ha abogado por estudiar una reformar de la ley electoral después de que hace tres años y medio el pacto entre PAR y PSOE dejara a la lista más votada fuera de la alcaldía.

Una vez finalizado el pleno, Blasco ha explicado a los medios de comunicación que "las principales áreas las tiene que llevar el PP, pero les pedimos colaboración" al resto de ediles, algo que ya sucedió en su anterior etapa como alcalde, entre 1999 y 2003.

El nuevo alcalde ha comentado que este jueves se reunirá con el secretario y con la interventora del consistorio para conocer la situación económica del Ayuntamiento.

Después, se conformará el organigrama municipal y seguidamente se abordarán asuntos como la reorganización, "en profundidad", de la Gerencia de Urbanismo y de las sociedades municipales que "hoy son muchas".

Asimismo, trabajará en la aprobación de los presupuestos para 2011. Según ha dicho en su discurso de investidura, han de ser unas cuentas "rigurosas en el cálculo de los ingresos y cautas en los gastos" porque la "austeridad ha de ser la norma a seguir", aunque siempre garantizando los servicios básicos.

El nuevo alcalde también ha apostado por "mejorar e incrementar las relaciones con otras Administraciones" y por insistir ante el Gobierno central para impulsar las comunicaciones, como la construcción de la autovía A-40 y la mejora de la conexión ferroviaria con Zaragoza o Valencia.

Además, ha mencionado el Museo Nacional de Etnografía, la restauración de la Catedral o la financiación de la Vía Perimetral de Barrios y si bien ha reconocido que "no es el mejor momento para acometer esas inversiones, si hay voluntad política, el Gobierno debería dejar, al menos, los proyectos encargados antes de que acabe la legislatura de ámbito nacional".

El psoe da por roto el pacto con el par

La concejal socialista Lucía Gómez ha dado por roto el pacto con el Partido Aragonés. "Hoy en la ciudad de Teruel se rompe un acuerdo de gobierno PSOE-PAR y no lo rompe el PSOE", ha dicho, para señalar que en los últimos siete años y medio los socialistas han sido "leales" hasta el punto de dar la alcaldía al PAR en 2007 a pesar de tener menos concejales que el PSOE.

En declaraciones a los medios, Gómez ha señalado que "no se ha producido una crisis en el equipo de gobierno, sino que la crisis del PAR ha hecho que rompieran con el PSOE" y ha apuntado que "es verdad que la postura de Ferrer ha ocasionado situaciones complejas, pero eso no debería recaer ni sobre el pacto de gobierno, ni sobre los ciudadanos".

Por otra parte, la edil ha ofrecido su colaboración al nuevo alcalde, si bien "no es un cheque en blanco" y ha pedido a Blasco "lo mismo que yo me voy a exigir: cabeza fría, serenidad y saber que, aunque estemos en periodo electoral, no podemos entrar en el 'tú más' porque no beneficiaríamos a la ciudad".

Ha añadido que "estamos orgullosos de nuestros avances (en referencia al trabajo de la coalición estas dos legislaturas), pero también sabemos explicar nuestros errores".

El par justifica su abstención

El portavoz del PAR, Julio Esteban, ha mostrado su intención de colaborar con el nuevo alcalde y ha deseado que la normalidad vuelva al Ayuntamiento "dejando de lado los intereses partidistas". Tras la sesión plenaria, ha justificado la abstención porque "no somos partidarios de colaborar con votos raros, por decirlo dulcemente".

Además, ha reconocido que el PSOE "ha sido leal, pero quien no ha sido leal con el pacto ha sido Ferrer" y a pesar de que se podría haber reeditado el pacto con el PSOE ha dicho que "teníamos la posibilidad, pero no con el pacto original, sino con un voto raro".

Por su parte, el ex alcalde de la ciudad y ahora concejal, Miguel Ferrer, ha declarado a los medios de comunicación que "he votado al PSOE porque no he querido romper la coalición PAR-PSOE". A su juicio, la "irresponsabilidad" está en la abstención porque "al fin y al cabo la responsabilidad de la crisis la tiene el PAR porque no ha sabido estar a la altura; si ellos hubieran votado al PSOE, se mantendría el equipo de gobierno".

En su intervención en el pleno de investidura, Ferrer —que ha sido el único que no ha recibido aplausos del numeroso público tras sus palabras— ha ofrecido su colaboración a Blasco "en todo lo que necesites en tu trayectoria en estos meses".

Cha critica la "irresponsabilidad"

El portavoz de CHA, Francisco Martín, ha ofrecido su colaboración al nuevo alcalde y ha definido lo ocurrido en los últimos días como "irresponsabilidad", tanto la del alcalde "dimisionario", con su "sonora espantada", como la del PAR y la del PSOE.

Martín ha criticado al PAR porque ha pasado de "maniobrar al límite para obtener la alcaldía a desentenderse de sus compromisos en el pacto de gobierno" y al PSOE ya que, "siendo socio de gobierno, no ha sabido parar la crisis y, una vez en ella, no ha querido solucionarla".