Los directores generales de Caixanova y Caixa Galicia, José Luis Pego y Javier García de Paredes, se han reunido este miércoles con los representantes sindicales de las cajas, ante los que han rechazado la privatización de la nueva entidad resultado de la fusión y a los que han lanzado "un mensaje de diálogo" para la tramitación del ERE que tiene como fin la reducción de plantilla.

En declaraciones a los medios a la salida del encuentro, que se ha prolongado durante una hora en la sede de Caixanova en Santiago de Compostela, el director general de esta entidad y quien será número uno de la nueva caja, José Luis Pego, ha reafirmado que "la intención" es "seguir siendo una caja de ahorros".

Preguntado acerca de las denuncias sobre una posible "bancarización" mediante la emisión de cuotas con derechos políticos, José Luis Pego ha expresado que "hay una realidad que está ahí, en el entorno" que rodea a ambas cajas. "Pero nuestra intención es seguir siendo una caja de ahorros", ha recalcado.

Sin embargo, previamente, el responsable de CIG-Banca, Clodomiro Montero, ha destacado que "este temor no ha sido disipado" en la reunión. "No se renuncia a utilizar esos instrumentos si fuera preciso y, por tanto, no se despeja la incógnita de si realmente el objetivo final va a ser privatizar la entidad", ha resaltado.

Pese a todo, Pego ha calificado la reunión como "positiva" y ha explicado que tenía "simplemente" un objetivo "clarificatorio" respecto a "algunos equívocos que se podían haber producido en determinados momentos" de la negociación del pacto laboral, firmado por CC.OO. y Csica, que representan al 65 por ciento de la plantilla.

En este sentido, ha resaltado que la finalidad era "mandar un mensaje de diálogo" y ha incidido en que ambas cajas tienen "una política de recursos humanos muy claramente establecida". "Una política donde las personas son importantes y el respeto mutuo y la colaboración tienen que presidir todas las actuaciones por parte de todas las personas implicadas en llevar a cabo este proyecto tan ilusionante", ha proclamado.

Por su parte, el que será director adjunto de la nueva caja, el director general de Caixa Galicia, Javier García de Paredes, ha subrayado que el objetivo era "restablecer la norma de diálogo que siempre ha presidido" las relaciones sindicales de las cajas.

Al respecto de la reunión convocada para la tarde del miércoles, García de Paredes ha afirmado: "No creo que haya ningún problema para el mantenimiento y el contenido de la reunión que se va a celebrar esta tarde". CSICA,

"pendiente de una decisión de última hora"

El miembro de la ejecutiva de Csica Luis Paz ha coincidido en realizar una evaluación "francamente positiva" del encuentro, en el que, según ha dicho, los directivos han trasladado la intención de "trabajar de la mano de los sindicatos". Así, ha esperado que "ese trabajo sea fructífero" con el propósito de "colaborar" en el desarrollo de "este importante proyecto".

No obstante, el representante de Csica ha apuntado que su presencia durante la reunión convocada para negociar las condiciones del ERE en la nueva caja está "pendiente de una decisión de última hora" de la ejecutiva del sindicato.

Ha anticipado, con todo, que su propósito "ha sido siempre" colaborar y defender de los intereses de sus compañeros "de una forma responsable". "Lo hemos demostrado en todo el tiempo de la negociación y en eso estamos", ha subrayado. CC.OO.,

"el primer defensor del acuerdo"

Quien sí ha confirmado su asistencia a la reunión ha sido el portavoz de CC.OO. en la negociación, Luis Mariño, al destacar que su sindicato es "el primer defensor del acuerdo" laboral.

Con todo, ha indicado que Comisiones "no sacó nada en limpio" de esta primera toma de contacto, porque "no se negoció nada" y tan sólo consistió en "formalismos".

Cig pide "un cambio de talante"

El responsable de CIG-Banca, Clodomiro Montero, ha ahondado en que el propósito de esta mañana fue la exposición, por parte de los directores generales, de su "relatorio de intenciones". "Estuvimos hablando es de los desencuentros que hubo en los últimos tiempos", ha apuntado, para señalar que su solicitud fue "una aclaración respecto al futuro de la nueva caja".

CIG, que ha demandado conocer si la nueva entidad "va a emitir cuotas participativas con derechos políticos", ha advertido que ésto "conllevaría la entrada de capital privado en las cajas y por lo tanto, su privatización". "No se renuncia a utilizar esos instrumentos", ha resaltado Montero.

Por ello, el representante sindical ha vinculado el ERE con el deseo de los dirigentes de "reestructurar para privatizar", algo que ha equiparado con "lo que ocurrió" en otras empresas públicas como Telefónica e Iberia. Con todo, ha esperado que la "declaración de intenciones se traduzca en un cambio de talante" para negociar "mayores garantías" que, según ha dicho, no están incluidas en el acuerdo laboral.

Ugt valora "un cambio de actitud"

Por lo que respecta a UGT, su portavoz, José Ramón De Pliego-Valdés, ha apreciado "un cambio de actitud" por parte de la dirección de las cajas, pero ha aplazado su valoración porque "hay que ver si son sólo palabras". "Esperamos que no", ha apostillado.

Este sindicato tampoco acudirá al encuentro sobre el pacto laboral al considerarlo "una imposición imposible de aceptar" y tras denunciar que la convocatoria se realizó "con el ánimo" de que los sindicatos dijeran que no asistirían.

Cgt critica "las formas"

Por último, el delegado sindical de la CGT, Antonio Rosales, ha considerado que la dirección de las cajas debe mostrar, también, "el espíritu" de diálogo que ha reclamado a los sindicatos.

"Esperamos que la reunión de hoy sea un punto y a parte y se empiece a dialogar de verdad", ha indicado, para concluir apuntando que la CGT no acudirá a la cita de la tarde "por las formas".