El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, eludió este viernes manifestarse acerca de la polémica generada en torno a la adjudicación por parte de la Consejería regional de Sanidad del concurso del servicio de hemodiálisis a Lifeblood, y dijo asumir "el cien por cien" de las palabras del portavoz regional, Martín Marrero.

"El portavoz del Gobierno fue muy claro. Yo no lo diría mejor que él. Estoy de acuerdo con lo que dijo el portavoz ayer", tras la reunión del Consejo de Gobierno, aseguró a los medios Rivero en un acto público en Las Palmas de Gran Canaria.

El portavoz del Ejecutivo de Canarias, Martín Marrero, afirmó que la administración regional defiende la libre concurrencia a los concursos públicos, en relación a la adjudicación provisional del servicio de hemodiálisis de dos hospitales del archipiélago, aprobado por la ex consejera del ramo, la popular Mercedes Roldós, el mismo día en que se rompió el pacto entre PP y CC en las islas.

"Como principio general el Gobierno defiende, ha defendido y seguirá defendiendo la transparencia, el rigor y la libre concurrencia de empresas en todos los procedimientos de contratación pública", subrayó Marrero en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.

De todos modos, puntualizó que, tras producirse la adjudicación provisional del servicio de hemodiálisis en dos hospitales, una empresa de las que concurrió presentó alegaciones al proceso, por lo que éstas se están estudiando. "Estamos en la fase en la que se va a verificar el procedimiento seguido hasta la fecha", apuntilló.