Representantes de las cajas, encabezados por los responsables de recursos humanos, han entregado este jueves a los sindicatos con implantación entre sus trabajadores la documentación sobre el expediente de regulación de empleo (ERE) a través del que se hará el recorte de 1.200 empleos previsto con la fusión.

La cita fue en el auditorio cultural de Caixa Galicia en Santiago —eligieron una sala grande, dado que estaban convocados más de 200 delegados sindicales— y los responsables de las dos entidades de crédito hicieron entrega de un CD con la memoria explicativa del ERE, los motivos, la información económica y otros documentos para dar cumplimiento a los requisitos legales establecidos en estos procesos. Las partes están convocadas para un segundo encuentro el próximo miércoles.

Los representantes de CIG, UGT y Csica han manifestado su desacuerdo con la forma de presentar la documentación y se quejaron de que no se entregase en papel. Asimismo, el responsable de CIG-Banca, Clodomiro Montero, ha advertido de que estudiará con los servicios jurídicos la posibilidad de impugnar este primer acto. Tanto Juan Quicler (de Csica) como José Ramón de Pliego-Valdés han censurado las "malas formas" de los directivos.

"Ha sido una tomadura de pelo", se ha quejado el representante de UGT, que ha avanzado la intención de esta formación sindical de no acudir a la próxima reunión en señal de protesta.

Por su parte, el portavoz de CC.OO. en la negociación, Luis Mariño, ha indicado a Europa Press que, dado el volumen de información recopilado, se "sintetiza en el CD". "Simplemente es una reunión multitudinaria para recoger la documentación e iniciar el proceso", ha señalado y ha matizado que se trata de un acto "formal y preceptivo legalmente".

Así, ha explicado que los sindicatos que lo consideren podrán presentar sus alegaciones. Para la aprobación final del ERE, que corresponde al Ministerio de Trabajo, previa consulta a la Xunta, es necesario un informe favorable de la mayoría sindical, ha agregado Mariño, que ha considerado que el aval de CC.OO. y Csica —las dos organizaciones que firmaron el pacto laboral y que representan al 65%de la plantilla conjunta de Caixa Galicia y Caixanova— sería suficiente.

El expediente se prepara "por separado por cada entidad pero para aplicación desde la entidad única", pues la caja fusionada no está formalmente constituida. El objetivo del proceso es "acelerar los plazos" para que todas las partes de la fusión se culminen cuanto antes. "El acuerdo laboral tiene una mayoría estable", ha concluido.

Quicler, pese a que se ha quejado de que "las formas los pierden —a los directivos de las cajas— y se falló en la educación", ha señalado que no hay cambios en la postura de este sindicato respecto al pacto laboral, aunque "hay algunas dudas" que resolver.

Concentración de la cig

La CIG ha convocado una protesta a la hora de la reunión, a la que asistieron, según el propio sindicatos, en torno a medio centenar de delegados de personal, que manifestaron su descuerdo con el ERE y la forma de abordar el recorte de plantilla en las cajas.

El acuerdo, ha dicho Clodomiro Montero, afecta a las condiciones de los trabajadores que permanecerán en la caja fusionada y busca un "desmantelamiento para la privatización" de la entidad que resulte de la unión. Además, han criticado que los directivos de Caixanova "se han subido el sueldo", pese a "estar despidiendo gente".