El pasado 18 de octubre, las autoridades mexicanas incautaron 134 toneladas de marihuana en Tijuana, en lo que supuso uno de los mayores golpes a los cárteles de la droga y el mayor decomiso de esta sustancia en el país. La cantidad era tan abundante que la quema, que se celebró entre altas medidas de seguridad, duró dos días (se incineró en grupos de 50 toneladas).

Los mandatarios del país se congratularon del logro al tiempo en que los narcos anunciaban represalias, que se concretaron cuando 14 internos de un centro de rehabilitación fueron fusilados por un comando armado en Ciudad Juárez. Minutos después, en la frecuencia de radio de la Policía, se escuchó que aquello era "el inicio" y que pretendían ejecutar "a 135 personas por las 134 toneladas de marihuana" incautadas.

Tras este ataque se produjo otro de similares características en Tijuana, en el que murieron otros 13 internos. Tras estas 27 muertes, los narcos continuaron con su macabra amenaza matando a 15 jóvenes en un lavado de coches de Tepic, varios de los cuales eran ex toxicómanos.

En total son 42 las víctimas, lejos aún de las 135 que anunciaron los narcos. Sin embargo, el propio presidente mexicano, Felipe Calderón defendió este miércoles su estrategia de combate al narcotráfico al mismo tiempo en que admitía que costará más "pérdidas de vidas humanas".

Un antecedente similar hace un año

No es la primera vez que los drogadictos en centros de rehabilitación se convierten en objetivo de los narcos. Hace algo más de un año se produjo una oleada de asesinatos similar en la que perdieron la vida más de 40 ex toxicómanos. Igualmente, 19 personas fueron asesinadas y cuatro resultaron heridas en una de estas instalaciones de Ciudad Juárez el pasado 11 de junio .

El Gobierno mexicano ha dicho en varias ocasiones que la marihuana continúa siendo la principal fuente de ingresos del narcotráfico mexicano, si bien el país es el principal distribuidor de cocaína colombiana y el mayor fabricante de metanfetaminas para el mercado estadounidense.

Estados Unidos dona dinero

Estados Unidos, por su parte, dará a la Organización de los Estados Americanos (OEA) tres millones de dólares (más de dos millones de euros) para financiar actividades de prevención y de reducción de la demanda de estupefacientes en México.

Con este acuerdo, el Gobierno mexicano se compromete ante la OEA a impulsar en los próximos años políticas públicas y programas encaminados a disminuir el número de consumidores de drogas en su territorio.