Y de ello se encargan una veintena de personas, casi todos jubilados o prejubilados. «Es una ocupación que nos llena y contribuye a llenar muchos estómagos»,

explica Rafael Fernández, secretario de esta organización sin ánimo de lucro.

Obtienen los alimentos a través de los excedentes de empresas agroalimentarias, distribuidores mayoristas y organismos oficiales. Y lo reparten en asociaciones

benéficas, colegios, residencias de ancianos o centros de acogida para toxicómanos de toda la provincia. Llegan hasta Vilagarcía de Arousa o Cambados.

El banco vigués repartió el pasado año 407 toneladas de productos, con un valor en el mercado superior a 1,1 millones de euros. Desde su creación en 1995, ha recogido y entregado 1.500 toneladas de productos, valoradas en 2.750 millones.

A partir de este año, el banco de alimentos se hará cargo además del reparto de productos procedentes de organismos de la UE, que antes distribuía la  Cruz Roja, por lo que darán de comer cada día a casi 15.000 personas de toda la provincia.

Cómo colaborar

El banco vigués cuenta con la colaboración de unas 150 empresas e instituciones, pero con menos de una docena de socios particulares.

Socios: Cualquier persona puede colaborar en el proyecto. «Cinco o diez euros al mes son suficientes», explica Rafael Fernández, para comprar productos, como legumbres, que no se producen aquí.

Donativos: Siempre van destinados a la compra de más alimentos. En la página web www.vigoweb.net/bancodealimentos hay formularios para colaborar. Información, teléfono: 986 26 30 22.