Fincas y Transportes, empresa que gestiona el ascensor del barrio bilbaíno de Arangoiti, ha señalado que, en las actuales condiciones tarifarias y debido a las pérdidas que acumulan, en un plazo de dos meses se cerrarán los ascensores de este barrio porque "no da para más".

El abogado de la empresa, Pablo Atxa, ha comparecido en el Parlamento vasco para hablar sobre la situación del ascensor de Arangoiti, cuyo funcionamiento ha provocado durante años las quejas de los vecinos.

Tras estas quejas, los ascensores fueron rehabilitados por completo y, para la financiación de la obra, el Gobierno vasco concedió una subvención de 600.000 euros, de los que 123.000 euros no abonó por "incumplimiento" del convenio de 2007, por el que se instrumentalizaba esa ayuda para la financiación de las obras de rehabilitación y recuperación de los elevadores.

En su intervención, el representante de la empresa ha denunciado que hay aspectos que quedaban fuera de las ayudas concedidas por el Gobierno vasco para la remodelación de los ascensores, entre las que ha citado, la licencia municipal de obras.

El representante de la empresa ha señalado que esos costes no cubiertos por la ayuda se elevan a 90.000 euros, que, a su juicio, deberían ser repercutidos a la tarifa, lo que no ha sido posible porque las tarifas no se han modificado desde 2006. Ello, según ha indicado, se ha traducido en "pérdidas" para la empresa.

Según ha manifestado, en las actuales condiciones tarifarias no cubren los gastos de explotación "ni por casualidad". En concreto, ha precisado que para "un mantenimiento decente" del ascensor se necesitarían unos ingresos de 300.000 euros, lo que supondrá elevar el billete del ascensor de 28 a 90 ó 95 céntimos de euros. En la actualidad, según cifras del pasado año, los ingresos fueron 60.000 euros.

"Así no se pueden mantener los ascensores en estas condiciones. Es un milagro haber llegado así", ha señalado. El responsable de Fincas y Transportes ha indicado que no tienen "dinero" y, con esas condiciones, lo que queda es el "cierre" del ascensor en el plazo de dos meses.

Ante la decisión del Gobierno vasco de no abonar los 123.000 euros de ayuda que quedaban pendientes de entregar a la empresa, ha señalado que quien no ha cumplido el convenio es el Gobierno vasco y le ha recordado que la dirección de obra y la propiedad estaban facultados para hacer las modificaciones de obra que considerasen oportunas y que, además, se comunicaron al Gobierno vasco.

A su juicio, el Ejecutivo vasco está incurriendo "en un tratado de mal gobierno, está actuando en perjuicio de un servicio público necesario".

El representante de Fincas y Transportes ha denunciado que ha habido "muchos agravios" a Fincas y Transportes y ha señalado que "dos no se juntan, si uno no se quiere" y, en este sentido, ha manifestado que el Gobierno vasco no tiene "voluntad de tratar ningún asunto".

Según ha indicado, las obras "no han sido perfectas" pero ha indicado que "se corrigen", lo que no justifica la "barbaridad" de no abonar los 123.000 euros restantes.

Tras estas obras, ha indicado que los ascensores funcionan "bien", pero puede haber "perjuicio para la seguridad" por el "deterioro económico acumulado".

En este sentido, ha señalado que el Gobierno vasco debería ayudar a la empresa o si no "dejar cobrar lo que cuesta" el servicio a los usarios. Tras indicar que hubieran preferido el rescate de la concesión, ha insistido en que se han traspasado ya las "líneas rojas" y que, en esta situación, no pueden mantener el servicio.