UGT teme que el desmantelamiento de la antigua fábrica Mildred de Huesca no haga posible su reapertura

El sindicato UGT ha expresado su temor porque el posible desmantelamiento de la antigua pastelera oscense, Mildred, que fue adquirida por la multinacional griega Vivartia, imposibilite su reapertura.

El sindicato UGT ha expresado su temor porque el posible desmantelamiento de la antigua pastelera oscense, Mildred, que fue adquirida por la multinacional griega Vivartia, imposibilite su reapertura.

Vivartia firmó ante notario, el 24 de abril de 2009, la compra de la repostera oscense Mildred, por 8,5 millones de euros. Mildred había cerrado sus puertas dos años antes, lo que supuso el despido de sus 400 trabajadores.

La compra de la pastelera hizo prever una reapertura, que se retrasaba en el tiempo motivado, según Vivartia, porque la crisis económica desaconsejaba la reapertura de la fábrica de Huesca. Sin embargo, en junio de 2010, un mes después de haber acabado de pagar el montante económico en su totalidad, la firma griega desmanteló parte de las instalaciones de Mildred, ya que se llevó una de las siete líneas de producción a Estados Unidos. Los antiguos trabajadores mostraron su sorpresa porque preveían que la empresa reabriría sus puertas.

En los últimos días, se han producido nuevos movimientos de camiones, lo que hace pensar en un nuevo desmantelamiento. El secretario provincial de UGT en Huesca, Fernando Gállego, ha dicho que "las últimas noticias hablan de desmantelamiento, y nosotros teníamos la confianza de que la fábrica pudiera funcionar pero, según se ha dicho en varias ocasiones, el momento es malo económicamente hablando y al final se toman estas decisiones, que se suman a otras malas noticias que tenemos en la provincia".

Otras empresas

Gállego se ha referido también al cierre de la empresa Luna Equipos Industriales y a la aplicación de varios Expedientes de Regulación Empleo (ERE). En concreto, La dirección de Alquiser y el comité de empresa continúan negociando la propuesta de la empresa, en la que trabajan 53 personas, de despedir a diez trabajadores y aplicar un ERE temporal de 180 días durante un año para los que mantengan su empleo.

Además, otras dos empresas han presentado sendos ERES temporales, que afectarán a 42 trabajadores. Se trata del Hotel Ordesa, que ha presentado un expediente para 385 días y de la empresa de Almudévar de Inoxfera Peninsular, que afectará a 22 de sus 46 trabajadores por 129 días.

"Todo esto, además, coincide con la puesta en funcionamiento de la reforma laboral y vemos que hay empresas que van usando este recurso y que tan perjudicial vemos para el empleo", ha apuntado Gállego.

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