Asociaciones, Colectivos y Fundaciones de Víctimas del Terrorismo consideran "una humillación intolerable la exaltación pública de fotografías de asesinos", en referencia a la exhibición de fotos de presos de ETA. Además, muestran su apoyo a la política de 'tolerancia cero' del Gobierno vasco porque "supone un bálsamo" para sus "heridas".

En un comunicado, estas organizaciones se refieren, de esta forma, a la sentencia de la Audiencia Nacional que absolvió a cuatro miembros de la txosna 'Txori Barrote', que exhibió fotos de reclusos de la banda durante las fiestas de Bilbao.

El documento ha sido firmado por la Asociación Víctimas del Terrorismo, Asociación de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado Víctimas del Terrorismo, Asociación Extremeña de Víctimas del Terrorismo, Asociación Catalana de Víctimas del Organizaciones Terroristas, Asociación Andaluza de Víctimas del Terrorismo, Asociación Dignidad y Justicia, Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11 M, COVITE, Fundación Tomás Caballero, Fundación para la Libertad, Fundación Alberto Jiménez Becerril, Fundación de Víctimología, Fundación Fernando Buesa y Fundación Víctimas del Terrorismo.

Estos colectivos aseguran que acatan la resolución judicial, pero apoyan al Ministerio Fiscal y a la acusación particular de Daniel Portero en su decisión de recurrirla.

A su juicio, la sentencia confirma que "es apropiada la retirada de los carteles antes comentados como contraria al derecho de las víctimas", aunque no aprecie delito en su exhibición. "La exhibición pública de las fotografías de los asesinos supone una humillación intolerable para todas las víctimas del terrorismo y, por lo tanto, deben de ser retiradas del espacio público", han apuntado.

"anomalía palmaria"

Por ello, aseguran que no entienden que "algunos grupos políticos acepten como normal lo que es una anomalía palmaria". "¿O es que alguien podría entender como normal que en la Feria de Sevilla se exhibiese la fotografía del presunto asesino de Marta del Castillo?", preguntan.

En este sentido, recuerdan que la Ley de Víctimas aprobada por unanimidad en el Parlamento Vasco en junio de 2008 insta a los poderes públicos "a evitar cualquier acto que las humille o que atente contra su dignidad".

"Por último, queremos manifestar nuevamente nuestro apoyo inequívoco a la política de tolerancia cero que en este campo está llevando a cabo el actual Gobierno vasco, una política que supone un bálsamo para nuestras heridas", concluyen.