El Consistorio y la Diputación, las instituciones implicadas en el evento, tendrán que rascarse el bolsillo para pagar los 10,5 millones de pérdidas que ha dejado la carrera. Tras haber pagado una primera cuota de 3,6 millones, Bilbao Urban Circuit, la sociedad que crearon para gestionar el evento, todavía debe 6,9 millones, una cantidad que tendrá que abonar durante 2006 y 2007, los años para los que se contrató la carrera.

El concejal bilbaíno de Promoción Económica dio a conocer el dato en el pleno extraordinario celebrado ayer para «buscar culpables», según dijo el PP, el partido que convocó la sesión. Tras un intenso rifirrafe sobre las pérdidas, Barkala aseguró que celebrar la prueba en 2006 y 2007 no habría costado dinero. «Cuesta lo mismo hacer la carrera que no hacerla», afirmó, tras explicar que tenía «el apoyo de diversas entidades para 2006».

La carrera no se volverá a celebrar por la falta de consenso entre los partidos políticos. La ciudadanía, por el contrario, estaba a favor. Tres de cada cuatro bilbaínos, el 76%, están de acuerdo con repetir la prueba, según una encuesta municipal.

En busca de otros eventos

Los responsables municipales anunciaron ayer que Bilbao seguirá celebrando otros «eventos de calado internacional», pese al fracaso de las World Series. De hecho, el pleno se comprometió, con el apoyo del Gobierno (PNV-EA-EB) y la abstención de la oposición, a trabajar para conseguir eventos que proyecten la ciudad y le den actividades económicas.

Las reacciones

Iñaki Azkuna (alcalde): «Con esta jaula de grillos, con este gallinero, no se puede repetir el evento».

Antonio Basagoiti (PP): «¿De dónde saldrá todo el dinero que ha costado esta juerga, este fracaso?».

Txema Oleaga (PSE-EE):  «En este tiempo no nos han informado ni hemos formado parte del evento».

Julia Madrazo (EB): «Es mejor pensar en futuros eventos que volver atrás».