El Departamento de Sanidad y Consumo del Gobierno vasco ha asegurado, en relación al 'caso Contador' y al cuestionamiento de la calidad sanitaria de la carne que se consume en Euskadi, que realiza controles a toda la carne comercializada en el País Vasco, "sea cual sea su origen".

En un comunicado, Sanidad ha manifestado que, "además de no ser cierta la sospecha, es tremendamente injusta con el sector cárnico que en los últimos años ha hecho un esfuerzo muy importante para asegurar la trazabilidad de sus productos y su seguridad".

En ese sentido, ha precisado que, "a nivel europeo, y desde los años 90 del pasado siglo, existe un Plan coordinado para el estudio de residuos en alimentos de origen animal en el que participan todos los estados miembros".

Este Plan, ha explicado, "se elabora anualmente en el País Vasco, comprende toda la cadena alimentaria y en él participan, además del Departamento de Sanidad y Consumo, el Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial, Agricultura y Pesca, y las tres Diputaciones Forales, tomando muestras en animales vivos, en el momento del sacrificio, en almacenes y otros establecimientos, es decir, en el caso de la carne, de toda la que se comercializa, sea o no criada en el País Vasco".

También ha aclarado que cuando se realizan inspecciones en almacenes cárnicos y en carnicerías, los controles "se hacen, como es lógico, a toda la carne, independientemente que en origen también se haya controlado, y para ello se exige la documentación que así lo acredita".

Sanidad ha señalado que las marcas de calidad en la carne "pueden aportar al consumidor algunas garantías adicionales de calidad comercial, pero en ningún caso aportan una mayor garantía sanitaria", pero los requisitos sanitarios, "como es lógico, son iguales para toda la carne que está en el mercado".

Tras precisar que "lo importante no es opinar, sino informar", ha indicado que se incluyen los resultados del Plan de Investigación de Residuos en Alimentos de Origen Animal correspondiente a 2009 (y en el que aparecen datos históricos de los últimos 10 años), "como mejor demostración de que se realizan controles exhaustivos sobre la carne y otros alimentos para la detección de residuos tóxicos, independientemente de otros muchos programas de vigilancia y control que realiza este Departamento".