La consellera de Turisme, Belén Juste, ha achacado los 7.772 nuevos parados del sector valenciano de Servicios registrados en los servicios públicos de empleo en septiembre al incremento de las reservas de "muy última hora", motivado por la "incertidumbre" ante la crisis, y al "perjuicio" ocasionado por el Gobierno central a los establecimientos de primera línea de playa con motivo de la aplicación de la ley de Costas, entre otros asuntos.

Juste se ha pronunciado así en declaraciones a los periodistas tras reunirse con el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, y la comisión de Turismo de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) para abordar la problemática de la regularización de los chiringuitos, al ser preguntada por los datos dados a conocer este lunes por el Ministerio de Trabajo, que recogen un aumento en 5.505 personas del número de parados en la Comunitat en septiembre.

Al respecto, ha argumentado que "hay decisiones que toma el Gobierno nacional que perjudican muchísimo al empleo y a la generación de riqueza", en cuestiones "como el tema de los chiringuitos o el tema de organización de fiestas que tenemos durante los meses de verano, que se ha de pedir una licencia si se van a celebrar en la playa".

"Todo esto provoca al final un perjuicio", ha subrayado Juste, quien ha aseverado que "la gente, ante la duda, no contrata porque no quiere despedir más", de modo que "lo que hace es evitar el despido, pero también, por desgracia, se evita la contratación".

Además, ha indicado que también "se han notado muchísimo en estos últimos datos" otros factores como "la incertidumbre por el tema de la crisis", ya que "en torno al 60 por ciento de la contratación se está haciendo a última hora y eso no favorece en nada el contratar a más personal".

Juste ha remarcado que "desde hace dos años, el crecimiento exponencial de lo que se está contratando a última hora es tremendo" y el sector se ha de "ir acoplando un poco a esas nuevas fórmulas y estrategias de contratación" porque "antes se podía programar mucho más para contratar tanto en hoteles, como en restaurantes y en servicios, y ahora se está produciendo a última hora".

Como ejemplo, ha apuntado que las previsiones iniciales para agosto se situaban en torno al 80 por ciento de media de ocupación, pero finalmente se superó el 95 por ciento, hasta registrar en los meses de julio y agosto "los mejores datos de ocupación, no de rentabilidad, pero sí de ocupación y de llegada de turistas".

Más ocupación no se refleja en más empleo

No obstante, la titular de Turisme ha reconocido que ese aumento "no se ha reflejado mucho en más empleo" dado que "no hay confianza" y "se ha contratado muy poco, el 50 por ciento de personas que el año pasado", aunque ha precisado que esa menor contratación no ha supuesto "tener menos calidad".