Inbisa Construcción, perteneciente al Grupo Inbisa, ha finalizado las obras de rehabilitación de la fachada del emblemático Coliseo Albia de Bilbao, que a partir de esta semana, "los bilbaínos podrán disfrutar" ya que se ha retirado la lona de protección que la cubría, según ha informado el propio grupo en un comunicado.

El edificio de estilo italiano, situado en el número 13 de Alameda de Urquijo, se convirtió durante casi ocho décadas en epicentro de la ópera y del teatro en Bizkaia y su trasformación al Nuevo Gran Casino Nervión "está muy cerca".

Además, Inbisa Construcción es la encargada de la restauración integral del interior del inmueble, además de la imponente fachada. El proyecto y la dirección de obra ésta a cargo de la ingeniería Lantec.

Inicialmente se ha procedido a la demolición interior del edificio y se he llevado a cabo un vaciado tres sótanos, uno para la instalación del saneamiento y protección contra incendios, y los otros dos para la instalación de dos plantas de garaje.

Asimismo, desde Inbisa han precisado que "se está trabajando" en el Casino que se ubicara en la planta baja y primera. El Hotel, por su parte, se situará en la segunda, tercera y cuarta plantas restantes y tendrá un total de 97 habitaciones.

Por este conocido inmueble de la capital vizcaína, inaugurado en 1916, desfilaron las primeras figuras de la ópera, como Montserrat Caballé, María Callas o el fallecido Luciano Pavarotti.

El edificio Coliseo Albia se levantó sobre los antiguos jardines de los Campos Elíseos. Su primera piedra se colocó el 17 de julio de 1915 y se inauguró oficialmente en el año 1918. El arquitecto autor del proyecto fue D.Pedro Asúa.

En el año 1958, el edificio fue reformado por el arquitecto D. Rafael Fontán. En esta reforma se recortó el vuelo de las plateas, se recalzaron las columnas de fundición, se substituyó el muro de carga de ladrillo por un muro de hormigón y se aumentó el vuelo de los anfiteatros y fachadas, entre otras actuaciones.

En 2006 se procedió a la demolición de la marquesina que enmarcaba el acceso principal por Alameda de Urquijo, ejecutada en su día en la reforma llevada a cabo por D. Rafael Fontán.

Para la rehabilitación de la fachada se ha aplicado detergente para eliminar vegetaciones, grasas y suciedades orgánicas. Asimismo, se han reparado artesanalmente los elementos decorativos como cornisas, figuras ornamentales o escudos.

Por último, se ha aplicado también una capa de resinas acrílicas al disolvente como endurecedor de mortero antiguo, además de dos capas de mortero especial en base cemento de máxima adhesión para tapar fisuras y grietas. También se han aplicado capas de patina acuosa para dar color a la fachada y dos capas de laca de protección impermeabilizante e hidrofugante.