Agentes de la Policía Nacional han detenido en Pamplona a E.M.J., de 37 años de edad, nacido y domiciliado en Pamplona, como presunto autor de un delito de estafa, tras contratar más de 70 líneas telefónicas con datos personales ajenos.

La investigación se inició a raíz de una denuncia interpuesta por un particular el pasado día 9 de julio de 2010, en la que manifestó que, mientras se encontraba haciendo fila en un comedor social para comer, fue abordado por parte de un individuo que le ofreció que realizase diversas contrataciones de teléfonos móviles a cambio de una cantidad de dinero.

Además, según relató, le indicó que él no podía contratar porque tenía problemas con las operadoras y que pagaría las facturas generadas de las mismas. Asimismo, le convenció para que comprase un ordenador portátil, que fue facilitado al ahora detenido, bajo la promesa de que se lo pagaría.

Durante la investigación se acreditó que el denunciante había contratado doce líneas con una operadora y tres con otra. Los responsables de los establecimientos donde se contrataron las líneas telefónicas manifestaron que durante varios meses se había presentado la misma persona, con al menos cuatro personas más que contrataban diversas líneas telefónicas, pero siempre con indicación del individuo investigado.

Por parte del departamento de fraude de una de las operadoras, comunicaron que entre las cuatro personas, tenían contratadas un total de 51 líneas, todas ellas figurando como impagadas.

El total de líneas de telefonía móvil, contratadas por personas acompañadas por el ahora detenido en otros establecimientos del ramo asciende a más de 70 líneas, con diferentes operadoras. Esto ocasiona un elevado fraude a las mismas por impago de las citadas líneas, además del fraude provocado por el suministro de un terminal telefónico de alta gama a cada una de las líneas, que se encuentra todavía sin valorar.

En la investigación quedó acreditada su participación en un delito de estafa, al requerir a diferentes personas, a las que a cambio de una cantidad de dinero, y a sabiendas de que no iban a hacer frente a la facturación de las líneas contratadas, acompañaba a diferentes establecimientos de telefonía móvil, donde solicitaba una tarifa concreta y un terminal telefónico de alta gama. De este modo podía, posteriormente, beneficiarse de las llamadas con dichas líneas y vender los terminales telefónicos.

Al detenido, que fue puesto a disposición judicial, le fueron ocupados en el interior de su vehículo diversos contratos de teléfono móvil, de dos personas diferentes a las otras cuatro reseñadas. A uno de ellos le constaban cinco líneas contratadas con la misma operadora y dos al otro.