Las movilizaciones convocadas por los sindicatos en Ferrol durante la jornada de huelga general han sido secundadas por 6.000 personas, en el caso de CC.OO. y de UGT, y otras 6.000, en el de la CIG, según sus cifras. La Policía Local de Ferrol ha elevado estos números a 7.500 en la manifestación de la CIG y sobre 8.000 en la celebrada por CC.OO. y UGT.

De forma coincidente, los sindicatos han calificado la huelga de un "éxito total" y han augurado que provocará que el Gobierno tenga que "rectificar". Han estimado el seguimiento de la huelga en el 100% en el ámbito industrial, dado que los polígonos industriales de Río do Pozo en Narón, Vilar do Colo en Fene, y Penapurreira y Os Airíos en As Pontes, permanecieron sin actividad.

Tampoco abrieron las grandes superficies del polígono de la Gándara en Ferrol y, por primera vez en una huelga general, también ha permanecido cerrado el hipermercado Alcampo. La dirección de la empresa decidió no abrir las instalaciones después de haberse reunido a las 9.30 horas con los responsables comarcales de los tres sindicatos.

El seguimiento en el sector servicios se redujo al 80 por ciento, aunque una parte importante de establecimientos comerciales y hosteleros del centro de Ferrol permanecieron cerrados desde primera hora de la mañana.

En cambio, fue menor el seguimiento en el sector de la Función Pública. Los sindicatos lo redujeron al "65 o 70 por ciento". Pese a la jornada de huelga, el alcalde de Ferrol, el socialista Vicente Irisarri, ha continuado su actividad y ha mantenido una reunión con la embajadora de Australia en España, en el Centro Cultural Torrente Ballester, al estar el consistorio cerrado.

Medio millar de piquetes informativos

La actividad de los piquetes informativos fue intensa durante toda la madrugada, con la participación de casi medio millar de personas. Uno de los principales incidentes se produjo a las 6.30 horas en la estación de autobuses de Ferrol. El enfrentamiento entre la Policía Nacional y los representantes sindicales se saldó con la detención de dos afiliados a la CIG, que ya fueron puestos en libertad durante la mañana. También fueron identificadas tres personas más.

Entre las cinco y las cinco y diez de la madrugada, los bomberos de Ferrol tuvieron que intervenir para apagar las barricadas de neumáticos ardiendo que se situaron en el polígono de Río do Pozo de Narón, en la Avenida Nicasio Pérez, ante el hipermercado Alcampo en Ferrol, y en la estación de tren. También fueron localizados otros puntos con neumáticos ardiendo, como la rotonda que enlaza la carretera de Catabois en Ferrol con la AG-64, el polígono de Penapurreira, o la AC-861, en el kilómetro 42'400.

Algunos comercios de la ciudad naval aparecieron a primera hora de la mañana con las puertas selladas con silicona o pegamento. El grupo más numeroso de piquetes informativos, en torno a 200 personas, recorrió las principales calles del barrio de la Magdalena desde las diez de la mañana y obligó a cerrar a los pocos locales que permanecían abiertos. Según aseguró el portavoz comarcal de la CIG, Xesús Anxo López Pintos, delegados de la CNT llegaron a entrar en la Iglesia de las Angustias, a las 12:30 horas, y reclamaron que se parase el oficio religioso que se celebraba a esas horas, "porque la huelga es para todos".

"ganamos la huelga"

"Ganamos la huelga general", fue el arranque del discurso que en la plaza de Armas, bajo la lluvia, pronunció el responsable comarcal de CC.OO., Xulio Abelleira, para el que la huelga "ha sido un éxito" que obligará al "gobierno a rectificar" en un "momento histórico" en el que se "producen las mayores agresiones" a los trabajadores de la "etapa democrática".

Por su parte, Cesáreo Fraga, responsable comarcal de UGT, manifestó que con este seguimiento de la huelga general se insiste en exigir a la Unión Europea y a los estados miembros "una política económica y social que no está supeditada a las exigencias de los mercados financieros". "Digan lo que digan, el Gobierno tendrá que rectificar" y los "empresarios tendrán que dar respuesta a la negociación colectiva", añadió.

En el Cantón de Molíns, ante la Fundación Caixa Galicia, el portavoz comarcal de la CIG, Xesús Anxo López Pintos, aseguró que "la huelga fue un éxito" y exigió un "cambio de modelo socioeconómico". Se pronunció en contra del "diálogo social pactista" y anunció que "con la CIG en la calle, la lucha continúa".