La consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, consideró "manifiestamente ilegal" permitir que los ayuntamientos devuelvan en suelo municipal la deuda al Estado en concepto de devolución de los ingresos a cuenta recibidos.

En una respuesta parlamentaria a una pregunta formulada por el PP en comisión, Martínez Aguayo rechazó comparar el pago en solares de la deuda de los municipios con el pago en solares de la liquidación de la disposición adicional segunda del Estatuto de Autonomía o 'deuda histórica'.

Por ello, pidió al PP que "no inste a los ayuntamientos a cometer ilegalidades", aunque recordó que "no sé qué pensar al ver la manera de actuar del PP con casos como el Ayuntamiento de La Línea, actuando al margen de la ley".

"La liquidación de la 'deuda histórica' mediante solares era algo perfectamente válido y ese mismo razonamiento no se puede argumentar para la liquidación negativa de los municipios, eso último no se puede hacer", agregó la consejera, quien recordó que la Ley "deja definido legalmente cómo se produce esa liquidación negativa", aunque recordó que la normativa "ya fue flexibilizada a petición de Andalucía, y no se oyó a nadie más que lo pidiera entonces".

Presión fiscal

Por otro lado, la consejera además hizo públicos los últimos datos disponibles de liquidación del sistema de financiación, correspondientes al ejercicio 2008 durante una respuesta a otra pregunta formulada por el Grupo Socialista, donde destacó que en 2010 "la presión fiscal apenas aumenta 0,06 puntos porcentuales", de forma que dicha presión fiscal en Andalucía "es de las más bajas en el conjunto de comunidades autónomas".

La consejera, que recordó las medidas fiscales aprobadas por la Junta en 2010, que desplegarán sus efectos sobre todo en 2012 y 2013, indicó que en 2008 el porcentaje de presión fiscal sobre el PIB es del 3,92 por ciento en aquellos impuestos que son de competencia normativa autonómica, lo que coloca a Andalucía "por debajo de la media nacional, del 4,29 por ciento".

Agregó que en 2008 la recaudación por habitante fue de 712 euros, cifra "muy lejos de zonas como Madrid, la zona con mayor presión tributaria de España, con 1.500 euros por habitante".