El diputado general de Álava, Xabier Agirre, ha afirmado tener "plena convicción" de que la actuación del ex diputado de Administración Local y Equilibrio Territorial Alfredo De Miguel, durante "su etapa en la Diputación", fue "absolutamente transparente". Asimismo, ha asegurado que la "salud" del PNV en este territorio histórico es "excelente".

En su intervención en el Forum Europa-Tribuna Euskadi, Agirre ha reconocido que "la desoladora noticia" de la detención del ex diputado de Administración Local y Equilibrio Territorial Alfredo De Miguel el pasado 17 de marzo fue "un momento de verdadera dureza" desde el punto de vista político y personal.

El diputado ha resaltado que la Diputación actuó con "inmediatez" y se puso "a disposición de la Justicia", defendiendo la presunción de inocencia pero sosteniendo que, "si se demostrase la existencia de delito, se aplicara la ley con todo su rigor", y además ha solicitado su personación en el procediemiento como actor civil posiblemente perjudicado, que ha sido recurrida por el fiscal.

"Seis meses después, continúa la instrucción en su fase investigadora y no ha noticias sobre si habrá o no procesamiento", ha añadido.

Agirre, que ha insistido en que "por encima de todo las instituciones son sagradas", ha dicho tener "la plena convicción" de que la actuación de De Miguel fue "absolutamente transparente en su etapa en la Diputación".

En este sentido, ha manifestado que, "en el propio escrito del fiscal en el que plantea que no se nos admita como posible actor perjudicado, él mismo dice que no es pertinente esa personación porque en el actual momento procesal lo que se está es en el tema de Miñano y de determinadas contrataciones en el departamento de cultura, que no hay absolutamente nada a nivel de Diputación". "Y lo sazona con que ni espera que lo haya", ha añadido.

Aunque ha admitido que la imputación de miembros del PNV alavés en el caso de presunta corrupción "ha convulsionado al partido" y "el episodio" de la designación del candidato a la Alcaldía de Vitoria puede suscitar "turbulencias internas", ha asegurado que "la salud política" del PNV en Álava es "excelente". En este sentido, ha manifestado que "otra cosa es que, como en cualquier otra organización humana, haya problemas".

En relación a la imputación de miembros del PNV, ha indicado que "la Diputación, el partido en Álava y desde luego a nivel nacional, sin ningún tipo de dudas, han sido claros respeto de la posición a adiptar". Respecto a la designación de candidatos, ha explicado que, aunque provoca "cierta imagen de desorden extramuros del partido", obedece a "una peculiar manera de organizarse" del PNV y de designar a sus candidatos. En esta formación, ha destacado, "no hay cuaderno azul y el que se mueve puede salir perfectamente en la foto".

"Que haya piques, perfectamente legítimos, entre candidatos es inherente a la condición humana, pero en cuanto a la salud del propio partido es excelente", ha insistido.

Amenaza de mociones

Por otro lado, también ha recordado, en su intervención, que la legislatura foral ha transcurrido con "la espada de Damocles" de la moción de censura por parte del PP, en "una estrategia de desestabilización" intentando "ocupar una institución que le permitiera recuperarse de sus recientes fracasos en las urnas".

"Esgrimir como amenaza las mociones de censura, sin programa ni acuerdo que le den la solidez necesaria, no es el mejor camino para conseguir la estabilidad institucional", ha advertido.

En relación a la crisis de gobierno originada por la salida del diputado de Aralar tras no apoyar los presupuestos forales, ha considerado que obedeció a más a "planteamientos internos" en esa formación que a "diferencias insalvables" con la política del gobierno foral.

Treviño sigue "mal"

Por otro lado, ha manifestado que la situación de Treviño sigue "como siempre: mal" porque, "si no hay voluntad política de solucionar los temas, está como está". Tras reivindicar que Álava pueda tener su "octava cuadrilla", ha destacado que, mientras el PP defiende "con uñas y dientes" la integración de Treviño en este Álava, cuando "toca mojarse" en la reforma del Estatuto de Castilla León "la posición es la antagónica".

Agirre, para el que se trata de "un anacronismo histórico", ha destacado que los treviñeses "de manera mayoritaria" se ha pronunciado a favor de la integración en Álava, aunque se ha hecho "oídos sordos" a esta reclamación "absoluta y plenamente democrática".