El Grupo de IU-CA en el Ayuntamiento de Sevilla no respaldará la elevación a debate, por vía de urgencia, de la moción introducida en el último momento por el Grupo popular para que el pleno ordinario convocado para este viernes apoye el uso de suelos públicos de titularidad municipal para amortizar la deuda contraída con el Gobierno central. Los concejales de la federación de izquierdas, en ese sentido, preparan su propia propuesta para que la próxima sesión de la Corporación municipal debata "en profundidad" la participación de los ayuntamientos en los impuestos del Estado, moción que también incluirá la mencionada fórmula de pago al apoyar la coalición dicha opción.

Fuentes del Grupo de IU-CA, liderado por su portavoz y primer teniente de alcalde, Antonio Rodrigo Torrijos, han señalado a Europa Press que, efectivamente, en el pleno ordinario convocado para este viernes no podría prosperar la moción elevada por vía de urgencia por el Grupo popular en cuanto a la utilización de suelos municipales para saldar las deudas contraídas con el Gobierno central, dado que los tres ediles de la federación de urgencia no apoyarán el trámite de urgencia impulsado desde el Grupo popular.

No obstante, las mismas fuentes señalaron que el Grupo municipal de IU-CA, de cara al pleno convocado para el mes de octubre, está elaborando una moción relativa al debate general sobre el modelo de financiación local que incluiría la entrega de suelos de titularidad municipal para zanjar las deudas estatales, pues la federación de izquierdas respalda esta posibilidad. De cualquier manera, IU-CA entiende que el debate, como tal, no contiene la "urgencia" defendida por el PP para canalizar su moción a través de dicha vía, sino que se trata de un asunto con un "fondo" que no es otro que el papel de las administraciones locales y la necesidad de reformular su sistema de financiación, aspecto hacia el que se dirigirá la moción de la federación de izquierdas.

La moción de IU-CA, en ese sentido, contemplará los suelos municipales como "fórmula de pago" al Estado, pero se centrará en la necesidad de reformular la participación de los ayuntamientos en los impuestos del Estado, que según la federación de izquierdas deberían ser repartidos a tres partes iguales equivalentes al 33 por ciento entre el propio Estado, las autonomías y las administraciones locales.