El concejal de Hacienda y candidato socialista a la Alcaldía de Gijón, Santiago Martínez Argüelles, ha anunciado este miércoles que están encontrando problemas para encontrar una ubicación adecuada en una zona comercialmente viable para la construcción de un aparcamiento subterráneo en el barrio de la Calzada y ha señalado que están descartadas ya las dos opciones que se habían barajado, la de la plaza Miguel Servet y la de Calixto Rato.

Argüelles, durante una visita a las obras de construcción de un parking subterráneo en la plaza del Ingeniero Orueta, ha indicado que en Miguel Servet se decidió no intervenir por problemas estructurales de la plaza. No obstante, ha señalado que está en licitación la remodelación de esta plaza, cuyo plazo de recepción de ofertas concluyó este pasado lunes. Para él, en cuatro semanas es probable que esta obra esté ya ejecutada y ha añadido que, aunque tendrá aparcamientos en superficie, no los habrá subterráneos.

Respecto a la otra posibilidad, ha indicado que tiene un arbolado que el Ayuntamiento considera que merece la pena conservar, por lo que también ha quedado descarta la intervención en esta zona para no sacrificar los árboles.

Con todo aún no han encontrado una ubicación que cumpla con todos los requisitos que debería reunir una infarestructura de este tipo, como son la compatibilidad medioambiental -respeto a las zonas arboladas— o que no haya colectores, según él.

Unido a ello, Argüelles ha explicado que en estos momentos se están desarrollando los aparcamientos subterráneos del Parchís, la ampliación de Begoña, plaza 3 de abril (Piscinas de El Llano), Severo Ochoa, avenida de Castilla e Ingeniero Orueta, que suman en total cerca de 1.800 plazas.

Respecto a este último, ha indicado que se encuentra en una zona a caballo de los barrios de Pumarín y El Llano y con problemas de aparcamiento "muy serios", especialmente al estar próxima al espacio conocido como las '1.500', que apenas tiene plazas vinculadas a los edificios.

En concreto, se están construyendo 250 plazas de aparcamiento, de las que hay vendidas un 50 por ciento, a un precio de 18.000 euros más IVA en régimen de venta. Aunque el plazo de ejecución es de un año, la empresa confía en finalizar antes, por lo que antes del verano próximo podría estar operativo.

En este parking también hay cabida para trasteros y se baraja la posibilidad de desdoblar alguna plaza para motos o bicis. También se actuará en superficie, de forma que se recupere el parque que había anteriormente, con una amplía zona de juegos infantiles y espacios verdes.

Argüelles ha avanzado que se espera que el parking de la plaza del Parchís concluya antes de fin de año, lo que es a nivel de superficie, aunque ha mostrado su deseo de que pueda ser un poco antes "por razones comerciales". Poco más tarde lo hará el de Begoña, mientras que les siguen los de Severo Ochoa e Ingeniero Orueta, así como 3 de abril, mientras que el último es el de la avenida de Castilla.