El presidente de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), Francisco Toscano, consideró "un paso atrás" que las localidades paguen la deuda que tienen con el Estado con suelo, como ha propuesto el Ayuntamiento de Córdoba, y manifestó que así no se hace ciudad.

En este sentido, señaló, tras la presentación en Málaga de la 'Estrategia local para un turismo sostenible', que respeta lo que cada municipio haga aunque insistió es que esta petición es "una contradicción" puesto que, añadió, son suelos patrimonio municipal.

"Los suelos no nos han llegado caídos del cielo sino del desarrollo de las leyes democráticas y tienen finalidades para construir equipamientos públicos —colegios, zonas deportivas, culturales o verdes— y edificables, una prioridad para que la vivienda esté al alcance de toda la ciudadanía", aseveró Toscano.

Así, incidió a los periodistas en que los suelos sirven "para hacer ciudad, son espacios de convivencia para la ciudadanía de un municipio". A su juicio, los responsables municipales que se desprendan de esos suelos "están haciendo una dejación de su trabajo más importante: hacer esos suelos espacios de convivencia y cubrir además necesidades de los municipios".

Entregar este patrimonio al Gobierno central es, según el presidente de la FAMP, "una paradoja cuando le pedimos al Estado que sus suelos en nuestros términos nos los dé para que los desarrollemos". "Eso además tiene recuerdos antiguos, eso se hacía en el franquismo, cuando desde el Gobierno de la nación se decidía dónde iban determinados equipamientos y el municipio no tenía ni parte ni beneficio", aseveró.

Destacó que en una comunidad autónoma como Andalucía, donde se ha "consagrado" la autonomía y la democracia, "renunciar a esos principios es una barbaridad, aunque lo respeto". "Yo soy más exigente con el Gobierno central y autonómico, no quiero que me compensen deudas con suelo", apuntó, y subrayó la importancia de la Ley de Participación en los Tributos de la comunidad autónoma: "eso es lo que yo reclamo, que la participación en estos tributos y en los del Estado sea cada vez mayor".

Esa participación, puntualizó, llevará a un incremento del nueve por ciento "limpio". "Todos queremos más pero en esa línea hay que trabajar. No desprendernos de patrimonio y suelos que son útiles para los ciudadanos porque los ayuntamientos deben ser los que dispongan", agregó.

Límite de endeudamiento

Por otro lado, el presidente de la FAMP, cuestionado por el límite de endeudamiento de los consistorios, manifestó que está de acuerdo con que haya más flexibilidad aunque consideró "un gran avance que haya un tope".

Actualmente, prosiguió, hay que cumplir normas europeas, caso del plan de estabilidad presupuestaria "en el que todos tenemos que contribuir, y el Estado cuando ha habido flexibilidad, flexibiliza los niveles de endeudamiento".

"Ha puesto el techo en el 75 por ciento de nuestros ingresos reales para que no haya trampa, y eso se puede aumentar para que sean más los que se pueden endeudar", afirmó. Toscano precisó que "antes se castigaba a todos, a buenos y malos en su gestión, y ahora se pone un tope, que hay que subirlo, sí".

Además, añadió que los números están ahí y que las localidades que están más endeudadas "tienen color y apellidos": "hay un mayor número de municipios del PP endeudados, y también del PSOE pero en menor número".